Así volvió Sp-Berner a producir 32 millones de cepillos de dientes para Mercadona en España
- El fabricante valenciano vendió en 2022 la factoría en que los producía en China
- Asegura que ha conseguido igualar e incluso reducir los costes
- El grupo también fabrica una trona de bebés y el cepillo para fregar de Ikea
Ángel C. Álvarez
Valencia,
La explosión de la pandemia puso de relieve la dependencia de toda Europa de la gran fábrica del mundo, China. Una situación que se agudizó con los problemas en la cadena de suministro global, los retrasos y el encarecimiento del transporte internacional. Poco antes de que estallase esa tormenta perfecta, Sp-Berner, uno de los principales proveedores de productos de limpieza e higiene de plástico de Mercadona, puso en marcha un giro radical para relocalizar en nuestro país los cepillos de dientes más básicos que suministra a la mayor cadena española de supermercados.
La compañía familiar valenciana que fabrica desde los cubos y escobas a los envases herméticos de la cadena de Juan Roig, se había instalado en China en 2006 siguiendo la estrategia de muchas corporaciones europeas y estadounidenses para poder competir en costes en los productos de menor valor y más componente manufacturero. Ese es el caso de uno de los productos superventas que fabrica para Mercadona: el cepillo dental básico que comercializa en paquetes de tres unidades a un euro. Un artículo del que se venden 32 millones de unidades al año, según explica Jorge Escarpa, CEO de la compañía.
SP Berner empezó a preparar en 2019 una parte de su complejo en Aldaya (Valencia) para producir esta línea con un objetivo poder competir con los niveles de costes que tenía en China. Para ello realizó una fuerte inversión en equipos y en industria 4.0, que le ha permitido automatizar casi todo el proceso. "En China trabajaban más de 80 personas en esa línea de producción, mientras que aquí están trabajando unas quince personas gracias a la tecnología que hemos implantado", explica el propio Escarpa.
El máximo responsable de la empresa asegura que tras un periodo inicial en que lograron igualar los costes, ahora incluso están consiguiendo ser algo más económicos que la producción en China. A la subida de costes y salarios en el país asiático se suma los precios y la incertidumbre en el transporte marítimo por las últimas crisis de la guerra de Ucrania y los ataques en el Mar Rojo.
El giro estratégico
La vuelta de la fabricación de los cepillos de dientes de Mercadona a España es un símbolo de ese giro estratégico del grupo valenciano, que ha apostado por concentrarse en la producción en sus tres plantas valencianas en Aldaya, Chiva y Torrent donde emplea a más de 800 trabajadores. En junio de 2022 el grupo vendió su factoría china ubicada en Suzhou al que era su director de operaciones allí. Pese a que la fábrica también vendía para el propio mercado chino, la empresa española optó por desinvertir tras los parones generados por la pandemia en ese país y su apuesta por España. En su internacionalización grupo también había comprado el fabricante italiano especializado en muebles de plástico Shaf, pero aunque mantiene la marca y el mercado ya no produce allí.
"Hasta un radio de 2.000 kilómetros desde Valencia somos competitivos, a más distancia logísticamente no sale rentable frente a los productores locales", explicaba recientemente el directivo de SP Berner.
Pese a que buena parte su crecimiento ha venido con Mercadona, también en los últimos años ha diversificado su cartera de clientes con todo tipo de grandes clientes. La cadena de Juan Roig hoy representa el 22% de sus ventas. Pero además produce artículos plásticos para gigantes como Carrefour o Ikea, En el caso de la cadena sueca produce su trona de plástico o los cepillos de fregar de la cadena de mueble y decoración. También fabrica 550.000 sillas de plástico al año para el grupo cervecero Mahou, destinadas a las terrazas de los establecimientos hosteleros.
Según Escarpa, cerró el año pasado con unas ventas de más de 150 millones de euros, similares al ejercicio 2022 y su estrategia actual se centra en crecer en plástico reciclado, después de invertir más de 20 millones de euros en una planta propia en Torrent que ya le permite utilizar plástico reciclado para el 50% de su propia producción e incluso comercializar a terceros.
Esa es una de sus cuatro grandes divisiones, que se suma la de consumo, que incluye los productos de limpieza como cubos, cepillos y fregonas, además de envases herméticos para distribución. También cuenta con una división industrial, que realiza palets y cajas de plástico para uso en fábricas y plataformas logísticas, además de tapones. Por último, su división de mueble, que se centra en mesas y sillas de plástico para terrazas.