Retail - Consumo
La advertencia de la OCU a los que beben cerveza con limón: "No son lo que parecen"
- "Poco limón y mucho refresco azucarado"
- Así es la primera cerveza en polvo del mundo
- ¿Tinto de verano o cerveza? La respuesta definitiva sobre la bebida que menos engorda
Cristian Gallegos
Hace unos días contábamos las diferencias calóricas entre el tinto de verano y la cerveza, dos acompañantes claves en estos periodos de vacaciones y donde las olas de calor cada semana son cada vez más protagonistas. Hoy haremos referencia al consumo de cerveza con limón: su contenido y su aporte calórico, según un reciente estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).
Con agosto en marcha y con las altas temperaturas a flor de piel, se dispara el consumo de cerveza. En la mayoría de los casos, solemos preferir esta bebida con menos graduación, ligeras, suaves y refrescantes, tal como podían ser las cervezas con limón.
De esta forma, el último estudio de la OCU evidencia que no todas son iguales y que la presencia del limón es "casi testimonial". Así la entidad que protege a los consumidores ha advertido que el limón rara vez alcanza el 5% en las cervezas que contienen este cítrico para darle sabor. A su vez, también ha destacado que, aunque tienen menos graduación de alcohol, el aporte calórico es mayor.
En esta línea, la gran mayoría de los fabricantes de cerveza han lanzado ya sus versiones con limón, las conocidas 'Shandys' o 'Radler'. Pero esto no es nuevo, desde hace décadas en los bares se han servido cervezas mezcladas con gaseosa o refresco de limón, las populares "claras" o "claras con limón" que, en función de la zona, también son conocidas como "pika", "lejía" o "champú", ha señalado la OCU.
Origen de la cerveza con limón
Esta tradicional mezcla que conforma las 'Radler' se remonta a principios del siglo XX. Su lugar de origen viene de Baviera, Alemania, durante una carrera ciclista, al mezclar cerveza con limonada, pese a que muchos consideran que es un invento español.
Por su parte, las 'Shandy' proceden de Inglaterra, donde varios siglos atrás elaboraban una cerveza con jengibre, que posteriormente se cambió por limonada. Desafortunadamente hoy en día la realidad es diferente, pues el "tradicional zumo de limón" ha pasado a ocupar un lugar solo testimonial, y eso en el mejor de los casos, ha explicado la OCU.
"Poco limón y mucho refresco"
En este contexto, la entidad del consumidor ha comprobado cómo son las cervezas con limón en lata y han señalado que se han llevado varias "sorpresas". "La primera de ellas es la escasa presencia de zumo de limón: en su lugar encontramos un refresco azúcarado y aromatizado. La segunda sorpresa es que los términos 'Radler' y 'Shandy' se emplean para elaborar productos diferentes", ha declarado la OCU.
Así es el contenido de una 'Radler'
La OCU explica que son cervezas con un contenido de alcohol que varía entre el 2 y 3,2% en volumen, más o menos la mitad de una cerveza tradicional.
En cuanto a la cantidad de zumo, las hay para todos los gustos: desde las 'Radler' elaboradas sin zumo, solo con aromas -como la 'Radler Perlenbacher' (Lidl)-, pasando por las que llevan una cantidad mínima de zumo -solo un 0,4% tiene la 'Damm Lemon'-, hasta las más "generosas" con un 5% -'Radler Ambar' y 'Radler Saerbrau' (Carrefour)-.
Así es el contenido de una Shandy
Respecto a las 'Shandy', la entidad argumenta que son cervezas con un contenido alcohólico inferior al 1% en volumen, es decir, que se pueden comparar con una cerveza "sin alcohol" tradicional. En este grupo no hay presencia de zumo de limón: solo se añaden aromas.
¿Y las cervezas 0,0% con limón?
Aquí se incluyen algunas Radler o cervezas con limón que no llevan nada de alcohol. Todas las analizadas en este grupo contienen una pequeña cantidad de zumo, que no supera el 4%.
¿Son una opción más saludable?
En comparación con una cerveza tradicional, contienen menos alcohol, pero en su elaboración se incluye la presencia de refrescos azucarados, ha señalado la OCU. Eso hace que las 'Radler' tengan un contenido de calorías superior a una cerveza clásica, concretamente un 12% más de media, con aproximadamente 145 kcal por lata.
Las 'Shandy', en tanto, reducen su contenido en alcohol y rebajan sus calorías hasta las 110 kcal por lata de media, un 15% menos que una cerveza clásica, Y las Radler 0.0% tienen 89 kcal por lata, un 32% menos que una cerveza clásica.
La opción más saludable es, sin duda, la versión 0.0% de alcohol, pero hay que tener en cuenta que una lata de cerveza con limón puede tener un "contenido de azúcar equivalente a tres sobres de azúcar". También hay versiones edulcoradas, que pueden rebajar el azúcar, pero a costa de incluir edulcorantes como el acesulfame K o la sucralosa, que OCU no recomienda.