La crisis de la pasta lleva a Italia al borde de la huelga y amenaza ya a Reino Unido
- Las patronales del país transalpino piden un paro general de 15 días
- En Reino Unido los precios avanzan un 27%
Álvaro Moreno, Víctor Ventura
Un golpe en el corazón de Italia está desatando una auténtica crisis: el precio de la pasta está por las nubes. Según datos del Ministerio de Comercio de Italia y de Istat, el valor del alimento se ha disparado este marzo un 17,5% y un 16,5% en abril. Estas cifras han desatado la furia de los ciudadanos del país porque, según el índice de precios al consumidor solo se habían registrado un alza del 8,1% y del 8,7% respectivamente para esos meses.
La subida es un duro golpe para el italiano medio, ya que, según una encuesta de la Organización Internacional de la Pasta, los habitantes del país mediterráneo comen unos 23 kilos de este alimento al año. Una cifra que les convierte en el país del mundo más afectado por la subida de este alimento.
La respuesta no se ha hecho esperar y, mientras el ministerio de Desarrollo Económico ha programado desde hace semanas una reunión de emergencia para discutir este asunto. Sin embargo, la asociación de los consumidores del país, Assoutenti, propone una "huelga de pasta" que dure como mínimo 15 días.
La idea de un paro nacional para protegerse del incremento de los precios de su plato estrella ha cuajado entre otras patronales de defensa de los consumidores como Codacons, que propone una solución similar, alegando que la pasta habría sido objeto de especulaciones. En ese sentido, ha pedido una investigación de urgencia sobre las fluctuaciones y anomalías en los precios para ver si hay un acuerdo entre los fabricantes italianos.
La Comisión de alerta del Gobierno, de momento, está monitorizando en tiempo real la situación y han celebrado en un reciente comunicado del ministerio de Negocios que "ya se están mostrando signos de una caída de precios que creemos que podría ser significativa en los próximos meses".
No solo Italia
Pero si la subida del 17% en Italia ya es un problema, en Reino Unido la crisis es aún peor. Según los (malos) datos de inflación publicados por la Oficina de Estadísticas Nacionales del país este miércoles, el precio de la pasta se ha disparado un 27,7% interanual, en medio de una ola inflacionaria que sigue empeorando. Y los complementos más famosos de este alimento tampoco están teniendo una evolución mejor: la carne ha subido un 18,6%, el queso y los huevos un 29,3% y el aceite de oliva un 46,4%.
El incremento sorpresa de la pasta se ha producido porque los fabricantes están vendiendo ahora los alimentos producidos con el trigo especialmente caro que compraron en la primavera de 2022, después de que la invasión rusa de Ucrania llevara a los precios de este grano a superar los 1.000 dólares por fanega anglosajona (14,5 kilos). En la actualidad se mueve por los 600 dólares por fanega, pero la bajada no se reflejará en los precios hasta que se agoten las reservas de trigo de hace un año.
España, por el momento, se encuentra relativamente a salvo de este problema. El consumo medio es muy inferior al de otros países de nuestro entorno, con solo 4,22 kilos al año de media, y los precios 'solo' han subido un 7,4% interanual, según los últimos datos del INE.