Política

Los grandes empresarios dan la espalda al presidente Sánchez en el día de la Hispanidad

    Felipe Sánchez saluda a Felipe V en la recepción del 12 de octubre. <i>Foto: Efe</i>.

    elEconomista.es

    Una vez concluido el desfile militar con motivo del día de la Hispanidad, y antes de que arrancaran los tradicionales corrillos donde los políticos cuentan en el cóctel información en off a la prensa, Pedro Sánchez y su esposa, Begoña Gómez, protagonizaban un error de protocolo al empezar el besamanos. Ello tuvo lugar cuando, una vez que el presidente y su mujer saludaron a los Reyes en el Salón del Trono, se colocaron al lado del jefe de Estado para seguir saludando ellos también al resto de invitados. La secuencia apenas duró segundos. Rápidamente fueron requeridos por una persona de protocolo que los retiró del lugar. Sobre esta eventualidad, Moncloa justificó la actuación del presidente y su mujer, afirmando que en todo momento siguieron las indicaciones de Zarzuela, extremo éste que desmiente Casa Real a este diario.

    Entre los 1.500 invitados se pudo apreciar, al menos entre el sector empresarial, que solo dos de los presidentes del IBEX estuvieron presentes en la recepción que los Reyes ofrecen en estas fechas en el Palacio Real de Madrid. Los dos directivos, además, pertenecen a empresas con participación pública. Entre los grandes empresarios sólo se vio a Antonio Llardén, presidente de Enagas y Fernando Abril Martorell, de Indra. En los últimos años, era habitual encontrar a los presidentes o consejeros delgados de Telefónica, Iberdrola, Repsol e incluso de alguno de los grandes bancos.

    Este encuentro, al que asisten los más altos representantes de la sociedad civil, brinda la oportunidad de charlar con los ministros o con el presidente del Gobierno, además del habitual saludo a los reyes. En esta ocasión la recepción se celebró justo un día después de que el Gobierno anunciara una potente subida de impuestos para las grandes empresas, así como para sus directivos. Entre los sectores más perjudicados están los bancos y las petroleras, a los que quiere cobrar un Impuesto de Sociedades mínimo del 18%, así como las eléctricas, a las que también amenaza con disminuir la retribución para la producción nuclear e hidráulica.

    No convocará elecciones

    El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se mostró esquivo a responder preguntas sobre estos asuntos. Eso sí, en conversación con los medios descartó que vaya a convocar elecciones, reconoció que daba por hecho que le fueran a abuchear, lo que ya hacían con José Luis Rodríguez Zapatero y Felipe González, remarcó, y, que era complicado resolver las resoluciones contra el Rey en el Parlament, porque esta es una actuación meramente "declarativa". Además, destacó sus cuatro meses de determinación en el Gobierno.

    Por otro lado, fue notoria la ausencia de las dos grandes ministras del ramo, Hacienda y Economía. Mientras que las titulares de Industria, Reyes Maroto, o la de Trabajo, Magdalena Valerio, charlaron animadamente con los invitados. A la de Hacienda, María Jesús Montero, y la de Economía, Nadia Calviño, no se les vio en el acto del Palacio Real, aunque sí en el desfile militar.

    Otros ministros que asistieron fueron los de Exteriores, Josep Borrell, y el de Ciencia e Innovación, Pedro Duque, que se lamentaba de la falta de rigurosidad de algunos medios al informar de su sociedad. "Con este tipo de informaciones, no creo que haya en el futuro ningún científico o directivo interesados en entrar en política", señaló. Otra de las grandes ausentes fue la ministra de Defensa, Margarita Robles,cuya relación con el Presidente se deterioró tras el conflicto de Navantia, ya que Sánchez desaprobó su modo de actuar sin consultarla.

    Los que si asistieron fueron los presidentes de dos de las grandes auditoras, KPMG y Deloitte, Hilario Albarracín y Fernando Ruiz, respectivamente, así como el de Accenture, Juan Pedro Moreno.