Iglesias y Montero sufren un nuevo escrache en su casa al volver de sus vacaciones interrumpidas por amenazas

El vicepresidente segundo del Gobierno y líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, y la ministra de Igualdad, Irene Montero, sufrieron un nuevo escrache a las puertas de su casa en Galapagar (Madrid) justo al llegar de sus interrumpidas vacaciones en Asturias por pintadas y amenazas.

Fuentes cercanas han informado de que las personas que realizaron el escrache, que duró aproximadamente una hora, son las mismas que, desde el mes de mayo, llevan protestando en las inmediaciones del hogar de los dos políticos.

Hace unos días, Iglesias se querelló contra el organizador de las protestas por seis presuntos delitos de acoso, coacción, descubrimiento y revelación de secretos, desobediencia a la autoridad, alteración del orden público y contra el medio ambiente.

Iglesias y Montero han agradecido las muestras de apoyo tras abandonar sus vacaciones y han asegurado que las amenazas no frenarán su trabajo

Iglesias ha tildado de "grave" lo que está haciendo con su familia "la extrema derecha" y ha exclamado que "no hay derecho a que sus hijos tengan que sufrir las consecuencias y las tareas políticas de sus padres". Así lo ha expuesto en un hilo en Twitter ante los insultos e incluso pintadas amenazantes que ha recibido tras conocerse que estaba junto a su pareja y sus tres hijos en la localidad de Felgueres, de la que se ha marchado antes de tiempo en su periodo de vacaciones. Unidas Podemos ha denunciado que se trata de un nuevo episodio de acoso a ambos políticos.

En este sentido, ha señalado que lo que hace a su familia "la extrema derecha y ciertos medios es grave" pero también ha añadido que "hay que poner cada cosa en su contexto", pues hay gente "que ha pagado con su libertad, con su vida o con torturas defender sus ideas y hacer política". "No es nuestro caso", ha sentenciado.

Además, ha destacado la labor de los policías que les escoltan "cumpliendo su labor con la mayor profesionalidad y el mejor trato humano". "Gracias a toda la gente que nos ha ofrecido su casa. Gracias a todos los que no se dejan intimidar por la ultraderecha y sus medios" ha proseguido Iglesias.

Por último, ha enfatizado que "odio" y "amenazas" de todos aquellos que le han insultado "no frenarán" su trabajo. "El ejemplo de la gente corriente, honesta y valiente que no tiene miedo al fascismo, es para nosotros la mayor motivación para continuar", ha zanjado.

Por su parte, Irene Montero ha declarado que la agresividad de la extrema derecha es su "debilidad" y que, por lo tanto, "solo con miedo y odio pueden frenar el avance de la democracia y los derechos sociales".

La ministra de Igualdad ha apostado por no perder la perspectiva y ha apuntado que "los avances sociales y democráticos siempre tienen enemigos. Frente al odio: justicia social y democracia".

Pedro Sánchez y varios ministros han expresado su apoyo a Iglesias y Montero ante las amenazas sufridas en Asturias

Tras conocerse la noticia, numerosos compañeros de Gobierno de Iglesias y Montero han trasladado su apoyo de forma pública. Es el caso de Pedro Sánchez, presidente del Ejecutivo, que ha expresado su "cariño y solidaridad" y ha mantenido que "los insultos no tienen cabida en nuestra sociedad".

De la misma forma, José Luis Ábalos, ministro de Transportes y Agenda Urbana, ha condenado el "hostigamiento" a los dos políticos y ha llamado a no normalizar "la intimidación y el fascismo". Otros ministros como Alberto Garzón o Yolanda Díaz también han mostrado su solidaridad a través de las redes sociales.