Opinión

La inversión en I+D+i como clave para mejorar vidas

  • La inversión en investigación es una prioridad a escala global, no solo por el impacto en la salud, sino por sus implicaciones sociales y económicas

Ramón Berra

La ciencia ha avanzado a pasos gigantescos en los últimos años; de hecho, la integración de nuevas tecnologías, como la inteligencia artificial, está revolucionando la forma en que diagnosticamos y tratamos enfermedades. Aun así, todavía nos enfrentamos a enfermedades que dependen de una importante inversión en Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i), un impulso sin el cual muchos de los hallazgos científicos nunca verían la luz.

Avances como la inmunoterapia para el tratamiento de algunos tipos de cáncer o la edición genética para corregir mutaciones que causan enfermedades hereditarias están cambiando vidas. La salud de las personas afectadas por estas enfermedades mejora de manera radical, lo que demuestra cómo la inversión en I+D+i no solo genera progreso científico, sino que también tiene un impacto directo en la calidad de vida de millones de personas. Por ello, el verdadero valor de la investigación científica se mide en vidas humanas transformadas.

Otro aspecto relevante de la puesta en marcha de proyectos de I+D+i es el impacto en la economía global, principalmente debido a la generación de empleo en sectores de alta tecnología y biomedicina, y reducción de los costos a largo plazo asociados con enfermedades crónicas. También por ello, la inversión en investigación es una prioridad.

En Miranza, creemos que la inversión en I+D+i no es solo una necesidad, sino una responsabilidad que hoy nos posiciona como grupo pionero en la investigación y el desarrollo de soluciones avanzadas para tratar, e incluso llegar a curar patologías oculares que hasta hace pocos años parecían incurables.

Actualmente contamos con más de 100 proyectos de investigación en marcha, de los cuales el 80% han sido impulsados directamente desde Miranza. En estos estudios participan más de 200 expertos entre oftalmólogos, investigadores, optometristas, enfermeros y otros profesionales de los más de 35 de centros que el grupo tiene en España.

Entre estas investigaciones destacan avances en el laboratorio de genética, donde realizamos una inversión de aproximadamente medio millón de euros. En esta área somos capaces de generar modelos 3D de retinas humanas a partir de células madre de nuestros pacientes, para estudiar la afectación clínica asociada a las distrofias hereditarias de retina. Además, se están realizando también innovadores estudios utilizando la técnica CRISPR, más conocida como "corta y pega genético", para corregir mutaciones responsables de enfermedades que antes se consideraban incurables, lo que nos ha permitido analizar la eficacia de esta terapia y evaluar su potencial aplicación terapéutica en un futuro próximo.

Asimismo, desde el Grupo hemos participado en proyectos financiados por Unión Europea, en colaboración con otras instituciones internacionales. Este es el caso de 'Human Eye', una investigación que finalizó recientemente y en la cual, tuvimos la tarea de desarrollar un dispositivo para tratar enfermedades que provocan irregularidades corneales, con la ambición de convertirse en la alternativa al trasplante de córnea.

Otro proyecto que hemos impulsado ha sido el llamado 'VEMoS' (Virtual Eye Model System), un modelo virtual del ojo en 3D que simula la visión posquirúrgica personalizada de los pacientes que van a ser intervenidos de cirugía refractiva.

Por último, 'BE-LIGHT' es el proyecto que ha sido puesto en marcha con el propósito es estudiar el uso de las tecnologías ópticas y fotónicas y la inteligencia artificial en la comprensión, diagnóstico y tratamiento de enfermedades oculares. Actualmente, estamos explorando futuras colaboraciones internacionales que nos permitan continuar investigando y de esa forma continuar a la vanguardia de la salud ocular.

La I+D+i ha permitido identificar nuevas formas de controlar, frenar e incluso curar enfermedades que durante siglos han sido incurables. Por eso, el compromiso de Miranza con la investigación es firme, y seguiremos invirtiendo en ella con el objetivo de seguir mejorando el futuro de la oftalmología y, con ello, la calidad de vida de las personas.