El negocio bancario aún convalece
elEconomista.es
Los ingresos por comisiones avanzan en las grandes entidades financieras, pero aún desciende el margen de intereses.
Los cinco grandes bancos españoles cerraron 2017 con un beneficio de casi 4.700 millones en nuestro país, un 30 por ciento más respecto a 2016. Se trata de un muy abultado avance cuyo mérito corresponde en gran parte al alza de los ingresos por comisiones, los cuales crecen a un ritmo del 9 por ciento. Estas últimas cifras revelan dos cambios positivos en la gran banca. Por un lado, las entidades empiezan a cerrar la brecha, en relación al resto de los bancos europeos, que suponían sus muy bajos ingresos por comisiones. Es cierto que el sector financiero español, tradicionalmente, primaba la fidelización del cliente y, para ello, minimizaba este tipo de cobros, pero esa política ya no resulta aconsejable en un contexto tan difícil como el actual para la banca. En segundo lugar, las entidades españolas demuestran que saben aprovechar el poco atractivo que los depósitos tienen para sus clientes. Un momento como el actual es idóneo para ofrecer a los usuarios otros productos, como fondos de inversión, que generan más valor añadido. Sin embargo, ni siquiera esta adecuada estrategia comercial oculta el hecho de que, pese a la buena situación económica, el negocio crediticio aún no ha culminado su recuperación. Lo evidencia que el margen de intereses de los cinco grandes aún retrocede un 1,7 por ciento. Sin duda, influyen los bajos niveles que aún mantienen los tipos de interés. Pero no menos importante es la todavía escasa demanda solvente de crédito, la cual explica que la cartera crediticia continúe menguando, debido a que las amortizaciones aún son superiores a las concesiones de nuevos préstamos. Por tanto, el negocio bancario aún está convaleciendo, lo que implica que no terminaron las dificultades para el sector.