Motor
Un Alpine A110 vuelve a plantar cara a los Porsche 911, 50 años más tarde
- Supera al campeón del WRC 2024, un Hyundai i20, por más de dos segundos en un recorrido de menos de un minuto
- Una demostración de que desde un grupo generalista como Renault se pueden crear deportivos con alma de leyenda
- Adiós a la combustión por todo lo alto: Alpine se despide del A110 con este increíble R Ultime
Miguel García
Si Francia estaba triste porque el PSG ha perdido al fútbol, ¿por qué sonríen cuando en Goodwood un Porsche 911 ha batido a su Alpine A110?
Dijeron cuando presentaron el Alpine A110 R Ultime que "esta versión de A110 está destinada a dejar una huella imborrable en el diseño de los vehículos futuros". Y no se referían a sus líneas y al estilo, que también, sino a su concepción y lo que se puede conseguir dentro de un grupo automovilístico generalista, como Renault. La pasada semana, el Alpine A110 R Ultimate se ha permitido codearse con el Porsche de calle más radical y perder… ¿y qué más da? Especialmente, porque ninguno de los Porsche eran 911 matriculables, sino coches de carreras, para la 911 Cup o incluso participante en Le Mans.
¿Quién mejor que su piloto de pruebas, Laurent Hurgon que ha domesticado a su gusto cada reacción del coche, para disputar una carrera al sprint en Goodwood? Puede que ahí resida una gran parte los tiempos registrados, pero el potencial queda demostrado. Ya en Nurburgring consiguió el año pasado rebajar en 20 segundos el tiempo por vuelta del A110 R no-Ultime.
Testigo directo de la eficacia del R Ultime ha sido Dani Sordo, a bordo de un Hyundai i20 WRC. Hay que recordar que Hyundai con este modelo fue campeona del mundo de rallies 2024. El Alpine ha conseguido superarlo por más de dos segundos ¡en una prueba que dura menos de un minuto!
Sin embargo, el Alpine no ha sido el coche de producción más rápido. Eso ha quedado en manos del exclusivísimo Koenigsegg 'Sadair's Spear', como debía ser. Porque se pueden fabricar supercoches a mano, con ideas revolucionarias y componentes únicos: pensamos en objetos de deseo como Pagani o Koenigsegg, tan carismáticos como sus creadores (e inabordables para la mayoría). Y también se puede usar el talento de un fabricante de coches prácticos para uso diario, para desarrollar modelos con tanto carisma como para satisfacer al más exigente de los aficionados al automovilismo y a la conducción. Gracias, Luca (de Meo). Porque el exmandatario de Renault tuvo la visión de que ofrecer esta dualidad era posible.