Motor

El método Ferrari se impone sobre los coches de lujo: los híbridos aceleran frente a los eléctricos

El modelo híbrido Stradale de Ferrari. Alamy

Javier Fernández Sánchez

La industria automovilística europea no está pasando por su mejor momento. La lenta adopción del coche eléctrico y el incremento de la competencia de fabricantes chinos de vehículos con tecnología verde ha dificultado al sector del motor del Viejo Continente cumplir con las pautas marcadas por la transición ecológica. Ante esta situación, y en un contexto geopolítico crítico, Bruselas ha flexibilizado los plazos para cumplir el objetivo de emisiones de CO2. En este contexto, algunos fabricantes de coches de lujo están cancelando sus planes para lanzar coches eléctricos, mientras que otros están experimentando un momento dulce al calor de los vehículos híbridos.

Maserati, compañía propiedad de Stellantis, ha anunciado recientemente la suspensión de los planes para lanzar el MC 20 Folgore, la versión eléctrica del modelo de lujo MC 20, debido a la débil demanda prevista. Según sus estudios, los consumidores prefieren los poderosos motores de gasolina, "y no están preparados para cambiar a los coches de baterías eléctricas en un futuro previsible". Además, la compañía italiana prevé vender pocos vehículos en los próximos años.

El MC20, equipado con un motor de 630 caballos, fue lanzado en 2020 por un precio de 240.000 euros. La nueva versión eléctrica del coche prometía seguir la tendencia hacia el uso de tecnología sostenible, en consonancia con firmas pujantes como BYD o Zeekr, pero el rendimiento de la firma no permite seguir esos pasos. La firma vendió 11.300 vehículos en 2024, un volumen inferior a los 26.000 comercializados en 2023, registrando una pérdida operativa de 260 millones de euros.

Con estas cifras, Maserati se ha visto empujada a seguir el camino de compañías como Porsche, firma que optó el año pasado por pausar sus planes para fabricar vehículos eléctricos. La subsidiaria de Volkswagen decidió congelar sus objetivos de venta de coches eléctricos debido a la debilidad de la demanda. También fue clave el error de cálculo sobre la potencial transición de los usuarios de coches de lujo hacia la batería eléctrica. Todo ello, unido a la pérdida de terreno en China respecto a los rivales locales, ha formado un cóctel que le ha llevado a ganar un 30% menos en 2024 que el año anterior, llevando a la dirección de la marca a planear la eliminación de 3.900 puestos de trabajo.

Si bien el 27% de las nuevas ventas de Porsche fueron vehículos electrificados, el porcentaje de comercializaciones de coches completamente eléctricos fue del 12,7%. La falta de éxito de este tipo de vehículos entre los consumidores habituales de estos cochazos refuerza, paralelamente, el rol del vehículo híbrido como alternativa comercial en plena transición energética para las grandes firmas del motor. Aunque Porsche no descuida el segmento de coches eléctricos, pues lanzará un modelo eléctrico del Cayenne en EEUU a finales de año, la firma está evaluando crear una línea específica de modelos en el segmento SUV con motores híbridos y de combustión.

Según indicó el año pasado el consejero delegado de la firma italiana, Stephan Winkelmann, las grandes firmas automotrices han cambiado sus planes para abrazar completamente los coches eléctricos, dibujando una línea de acción a la cual se adhirió también Mercedes-Benz. Ola Källenius, director ejecutivo de la compañía germana, aseguró que la firma fabricará modelos híbridos hasta la década de 2030. Ambos empresarios dan con una de las claves: el mercado de coches eléctricos ha mostrado vigor en Europa a lo largo del último año, avanzando al calor de las ventas de vehículos híbridos.

En el caso de Lamborghini, la firma lanzó el año pasado las versiones híbridas de sus modelos Revuelto, Temerario. Según la compañía, el Revuelto fue el coche más vendido de la firma, la cual incrementó sus ventas un 6% el año pasado respecto al 2024, firmando el mejor año de su historia en términos de entregas. La empresa señaló que el impulso de los vehículos híbridos fue clave para alcanzar esas cifras.

Por su parte, las ventas de los modelos híbridos de Ferrari representaron más de la mitad de todas las comercializaciones que la compañía italiana realizó el año pasado, en el cual aumentó sus entregas moderadamente. Sin embargo, aquel avance le permitió registrar un aumento del 21% de las ganancias respecto al año anterior hasta los 1.530 millones de euros, firmando los segundos beneficios más altos de su historia.

La marca de Maranello ha priorizado el desarrollo de sus modelos híbridos y de combustión, programando para octubre de este año el lanzamiento de su primer eléctrico. Según Benedetto Vigna, director ejecutivo de Ferrari, la firma no está aplicando una transición eléctrica sino un "añadido eléctrico" en sus modelos.