Motor

Un tercio de los concesionarios españoles cierra 2024 en pérdidas

  • La rentabilidad de estas empresas se sitúa por debajo del 1% por la presión de las automovilísticas
Concesionario. Foto: Renault

Ankor Tejero

La transformación del sector del automóvil afecta de lleno a los concesionarios. En el caso de los españoles, uno de cada tres cerró el pasado ejercicio en pérdidas. Concretamente, el 31,4% de los concesionarios españoles finalizó el año 2024 con números rojos. Esto supone casi el doble que el ejercicio anterior, cuando el 19,6% de los concesionarios finalizó en pérdidas, según datos de Snap-on Business Solutions a los que ha tenido acceso elEconomista.es.

Cabe destacar que es la cifra más baja de todo el año, dado que al cierre del primer trimestre de 2024 el porcentaje de concesionarios en pérdidas alcanzó el 36%. Por áreas de negocio, las ventas de vehículos nuevos contribuyeron con el 64,5% de la facturación y con el 41,5% del resultado. En el caso de las ventas de vehículos de ocasión contribuyeron con el 19,2% de los ingresos de los concesionarios y con el 11,9% del resultado.

De otra parte, el área de Posventa supuso en 2024 el 16% de la facturación (5,2% Taller y 11,1% Recambios) y el 46,6% de la contribución al resultado (13% en Taller y 33% en Recambios), lo cual deja clara la importancia estratégica de una actividad que a los concesionarios les aporta casi la mitad de su rentabilidad.

Cae la rentabilidad

En lo que a rentabilidad se refiere, los concesionarios españoles la situaron en el 0,92%, muy lejos del 1,58% con el que finalizaron 2023. De hecho, durante todo el año la rentabilidad se situó por debajo del 1%. En 2024, todos los departamentos presentaron rentabilidades inferiores al año anterior, y solo los Talleres Mecánicos estuvieron cerca de igualar las cifras de 2023. Los concesionarios mantuvieron en 2024 una clara contención de gastos, lo cual debería ser una de las prioridades para 2025 si la facturación, como parece, se mantiene en los niveles actuales.

De cara al presente ejercicio, habrá que ver cómo afecta la flexibilidad de la normativa CAFE a las cuentas de resultados de los concesionarios. Si bien antes se verían obligados a matricular más modelos eléctricos con el fin de que los fabricante esquivasen las cuantiosas sanciones, ahora, con más tiempo por delante, habrá que ver cómo evoluciona. No será lo único, dado que también habrá que estar pendiente de cómo afecta a la cuenta de resultados la centralización de los grandes grupos, así como a la evolución de los tipos de interés, la cuota de mercado de las marcas chinas, los nuevos modelos de distribución o los programas de fidelización y retención de clientes por parte de los principales fabricantes.