Volvo EX30, un coche eléctrico urbano demasiado avanzado, para mi gusto

Volvo acaba de presentar en Estados Unidos su nuevo buque insignia, el EX90, su vehículo grande que solo será eléctrico y tiene en el mercado desde hace meses el EX30, el modelo más pequeño de la marca sueca que hemos probado en su variante de un solo motor. Un coche de enfoque urbano, muy tecnológico y moderno.

Volvo hizo hace unos años una gran apuesta por la electrificación, primero con sus modelos híbridos e híbridos enchufables, pero ahora llega la siguiente etapa para la electrificación total de la marca. Se trata de la nueva familia de modelos solo eléctricos, los denominados con las siglas EX, con los que piensa ofrecer en poco tiempo una gama completa de modelos de cero emisiones en su utilización.

Esta apuesta, al menos de momento, le está saliendo bastante bien, porque sus ventas de eléctricos suben por encima de lo que lo hace en el mercado global. El 37% de los coches vendidos por Volvo en Europa en 2024 fueron 100% eléctricos. Y a nivel mundial esta cifra se mantiene en el 38%. Los clientes de la marca de origen sueco están especialmente mentalizados con la protección del medio ambiente. Y además tienen la opción de instalar un punto de recarga en su casa.

Volviendo a los eléctricos, Volvo ya tenía dos modelos a la venta, el XC40 Recharge que ha cambiado su nombre por el de EX40 y la versión C40 que ahora se denomina EC40. Y hay otros dos modelos 100% eléctricos, el EX30 que hemos probado en esta ocasión y esta misma semana se ha presentado en Estados Unidos el EX90, su nuevo buque insignia. Es decir, el coche más pequeño de la familia es el EX30, de enfoque más urbano, al que se une ahora el más grande de la gama, el EX90.

Motorización de 272 caballos

El coche que hemos probado es el EX30 en su versión con un solo motor, es decir un vehículo compacto de 4,23 metros que con sus 272 caballos se mueve más que de sobra. Hay que tener en cuenta que por sus dimensiones no es un vehículo pensado para hacer viajes largos, sino más bien es un vehículo polivalente de enfoque eminentemente urbano. Y en esas condiciones, creo que el segundo motor de las variantes más potentes, que ofrecen 428 caballos de potencia combinada, resulta excesivo. Estas variantes pasan de 0 a 100 en 3,6 segundos, mejor que un Porsche 911, por ejemplo.

Este EX30 es un vehículo que sorprende a todo el mundo. Su estilo es ligero y elegante, su aspecto dinámico es muy acertado y resulta un coche perfecto para moverse con clase por la ciudad. Su diseño es muy llamativo, moderno pero sin estridencias. Si a ello sumamos sus pequeñas dimensiones, tenemos las razones del éxito comercial que está cosechando este nuevo modelo. En España desde su lanzamiento en primavera se han vendido ya 1.800 coches.

La diferencia de longitud entre el EX30 y el anterior modelo pequeño de Volvo, el XC40 que sigue a la venta en sus diferentes opciones mecánicas, es de 20 cm. Esa diferencia hace que el coche se mueva con más soltura por la ciudad y en carreteras viradas con curvas. Además, en este tipo de terreno su motor de respuesta inmediata ofrece un comportamiento dinámico muy agradable.

EX30, un Volvo demasiado avanzado

Antes de seguir con esta prueba, comentarles que el nuevo EX30 es un coche muy avanzado. A mí, que llevo ya muchos años conduciendo, me parece, quizá, excesivamente avanzado. Y les voy a contar mi experiencia cuando fui a recoger el coche para poder probarlo, para que puedan entender mis argumentos.

Al llegar al lugar de recogida, el coche estaba abierto y en marcha. Es decir, con el contacto activado. Salí del garaje y me paré unos metros más adelante para adaptarme al coche y entender todo lo que tenía este nuevo modelo. Fueron varias las sorpresas.

La primera es que no tiene botón de puesta en marcha. Conduzco muchos coches diferentes y ya tengo buena práctica para encontrar el botón de arranque, por muy escondido que esté. Ya sea en el volante, en la consola, en el lado izquierdo del volante, etc..., acaba apareciendo. Pero en este Volvo EX30 no hay botón de arranque.

Entonces, al no encontrarlo, volví hasta el lugar de la recogida para preguntar cómo se ponía en marcha. Y se me explicó que el coche es inteligente, que sabe cuándo queremos avanzar y automáticamente el coche por sí solo se activa.

Fue una primera sorpresa, pero no la única. La siguiente fue la llave: en lugar de un mando de los habituales, con botón de abrir y cerrar, el de abrir el maletero o incluso en los descapotables el de abrir el techo, en este caso del EX30 esto también es diferente. Es más, no hay ningún botón en dicho mando. Es una caja rectangular, pero no se aprieta en ningún sitio, el coche entiende que te acercas cuando detecta la llave y comprende que quieres entrar en el coche y abre las puertas.

Sin cuadro de instrumentos

Y todavía me queda una tercera sorpresa. En casi todos los coches hay un cuadro de instrumentos, pero en este caso del nuevo modelo de Volvo también esto cambia. No hay una pantalla por detrás del volante donde el conductor tenga velocidad, carga de la batería, autonomía, indicador de las luces, etc. Vamos, no tiene cuadro de instrumentos

Solo hay una gran pantalla central en la que está toda la información, los sistemas habituales de navegación o sonido y también los gestores de los sistemas de ayuda a la conducción. Vamos, todo se maneja desde esa pantalla. Se manejan las luces, la climatización y hasta la apertura de la guantera.

Esta pantalla digamos que tiene tres zonas diferentes. La parte superior, que no se puede cambiar, incluye datos de velocidad, circulación, autonomía, entre otros. En la parte central de dicha pantalla, la más grande, es la que normalmente llevan todos los coches en el centro del salpicadero. Ahí encontramos el navegador o el plano de la zona por la que circulamos, pero también la radio, la climatización o la imagen de las cámaras exteriores...

Y en la parte inferior tenemos la zona de las aplicaciones. Este coche utiliza el sistema de gestión de Android Auto como sistema operativo, lo que hace que las aplicaciones habituales, de tipo Waze o Google Maps, entre otras muchas, funcionen perfectamente.

Un coche moderno y hasta futurista

Sin duda, lo que me habían comentado era cierto, es un coche moderno, pero yo más bien diría que futurista. Quizá para los que hayan nacido con un móvil de última generación en la mano sea el coche perfecto, porque interpreta lo que quiere hacer su conductor sin tener que hacer nada. Pero yo encuentro algunas pegas al sistema. Sobre todo con la gestión de los diferentes sistemas que, como les decía, se manejan todos mediante la pantalla central, hasta la apertura de la guantera.

Pero hablemos del coche, de su interior y de su comportamiento dinámico. Su habitáculo es muy luminoso y ligero. Los materiales empleados le proporcionan un aspecto moderno y minimalista, realmente agradable. La ausencia de un salpicadero como tal y de un cuadro de instrumentos también le hacen mucho más alegre y fresco. Lo mismo ocurre con la ausencia total de botones por todo el puesto de conducción. Más agradable pero también más complicado de usar.

La postura al volante es buena, más alta que un turismo normal, pero algo más baja que la de un SUV, como el XC40. Por ello, una posición intermedia, realmente agradable. Las plazas delanteras son muy buenas, pero las traseras resultan algo justas en cuanto a espacio para las piernas. Y por lo que se refiere a su maletero, con sus 319 litros está por debajo de modelos equivalentes como el Hyundai Kona-e o el BMW i3. Bajo el capó delantero tiene un hueco donde poder guardar el cable de recarga, pero no cabe nada más, es muy pequeño.

Muy buen dinamismo

En cuanto a su comportamiento dinámico, esta versión de un solo motor les repito que creo que es la más razonable. La variante 4x4, en un coche como este no tiene mucho sentido esa tracción y tampoco por sus prestaciones. Coche eléctrico urbano y deportividad, creo que son dos conceptos que no combinan muy bien.

Las suspensiones son firmes, lo que contribuye a proporcionar un mejor comportamiento dinámico, pero sin renunciar al confort de marcha. Es un vehículo más pensado para moverse de forma confortable que para hacerlo muy deprisa. Los balanceos de carrocería son mínimos y su batería en el suelo del vehículo mejora su dinamismo. Y en este sentido cumple a la perfección.

Un detalle que me ha sorprendido es que no tiene los habituales modos de conducción. El coche solo va de una manera y la única opción que tiene el conductor es activar dos modos de retención diferentes. Por un lado el que se activa al poner en marcha el coche es el más suave, con poca retención. Hay un segundo modo con una retención bastante fuerte, más pensado para ser utilizado en ciudad casi como un "one pedal".

Alternativa razonable

Este Volvo EX30 se posiciona como una opción muy válida para ese tipo de clientes que buscan un coche eléctrico, básicamente urbano, pero con el que no se renuncia a hacer desplazamientos más largos. Su potente motor, incluso en esta versión "pequeña", mueve muy bien el coche y su comportamiento dinámico es muy bueno, con un buen confort de marcha.

A efectos de autonomía, nuestra versión era la de acceso con 51 kWh, lo que permite una autonomía homologada de 337 km. Es un valor bastante justo, sobre todo si queremos movernos mucho o si lo hacemos por carretera a velocidad un poco más alta. Existe la opción de una batería más grande, la variante de autonomía extendida, que tiene 70 kWh y que mejora su autonomía hasta los 476 km. Para esta ampliación hay que pagar unos 6.000 euros adicionales.

Para los que buscan un coche moderno, con la más avanzada tecnología, que sea de alguna manera una continuación de su móvil, este EX30 puede ser la opción ideal. En su interior encontramos igualmente un habitáculo moderno y muy luminoso, con una diseño muy agradable.

Todas estas virtudes han llevado a la marca sueca a lograr un gran éxito de ventas con este nuevo modelo en los principales mercados. En el caso de España, en lo que va de año la marca ha entregado ya más de 1.800 unidades, lo que le ha posicionado como el tercero más vendido de Volvo en el mercado español. Un coche que parte de los 37.000 euros y que es una alternativa muy diferente a todo lo que hay en el mercado. Sobre todo por su tecnología avanzada, y por su seguridad, que es una premisa básica en todo los modelos de la marca de origen sueco.

Ficha Técnica Volvo EX30

Motor eléctrico trasero

Potencia máxima: 272 CV

Par máximo: 345 Nm

Velocidad máxima: 180 km/h

Aceleración de 0 a 100 km/h, 5,7 segundos

Tracción: Trasera

Batería: 51 kWh

Consumo homologado WLTP en ciclo combinado 17,1 kWh.

Autonomía homologada WLTP: 337 KM

Potencia de recarga: hasta 135 kW en CC y hasta 11 kW en CA.

Dimensiones (longitud/anchura/altura), 4,23 x 1,83 x 1,55 metros

Capacidad maletero: 319 litros.

Peso en vacío: 1.840 kg.

Precio: Desde 37.550 €.