Motor

La investigación de la UE derrapa: China aumenta las exportaciones de coches eléctricos a Europa

  • Las exportaciones aumentaron en octubre un 32,25% interanual
Un coche eléctrico deportivo fabricado por BYD. Bloomberg.

Javier Fernández Sánchez
Madrid,

La crisis energética y la emergencia climática han empujado a la industria automovilística a la elaboración de coches eléctricos, cuyas ventas han aumentado en los últimos años. Si en 2020 estos coches representaban el 4% de las ventas totales de vehículos, en 2022 ya constituían el 14%. Ese mismo año, China concentró el 60% de las ventas de este tipo de coches a nivel global, erigiéndose como el país líder en este mercado. Para ello, Pekín ha empleado una política de subvenciones a los fabricantes que está siendo investigada por la UE por posible competencia desleal. Sin embargo, el comercio continúa, y mientas Bruselas realiza sus pesquisas, las exportaciones chinas de coches eléctricos hacia Europa aumentaron en octubre un 32,25% interanual.

El pasado mes de octubre, las exportaciones hacia Europa de vehículos eléctricos de origen chino alcanzaron por primera vez los 2.000 millones de dólares en un mes, doblando el valor de los envíos realizados en septiembre. De esta forma, las firmas chinas siguen aumentando sus ventas hacia el Viejo Contiente, potenciando un crecimiento que las llevó a aumentar las exportaciones un 112% interanual entre enero y julio de 2023, y un 361% interanual desde 2021.

Todo ello en un contexto delicado para los fabricantes chinos de este sector, ya que se está desarrollando una investigación sobre las subvenciones que el estado chino proporciona a las firmas del país asiático y que les permiten ofrecer los vehículos a precios más bajos que los de competidores occidentales. Así lo anunció Von der Leyen el pasado mes de septiembre en su discurso sobre el estado de la UE, en el que señaló que "Europa está abierta a la competencia. No a una carrera a la baja". Asimismo, la Presidenta de la Comisión Europea aprovechó el momento para recordar los estragos que esta política china tuvo en la industria solar del Viejo Continente.

Sobre esta cuestión, Von der Leyen señaló recientemente que la "sobrecapacidad" económica de China, alimentada por subsidios directos e indirectos, constituía una amenaza para Europa a nivel de competencia económica y de seguridad. "Esta sobrecapacidad será exportada", afirmó la Presidenta en relación a los coches eléctricos, indicando que esta situación se agravará a medida que la economía china se ralentice y su demanda doméstica no pueda absorber toda la producción. El resultado será una distorsión del mercado europeo, y esa es la razón por la que Bruselas está investigando los vehículos eléctricos chinos.

Además, el presidente de la Cámara de Comercio Europea en China, Jens Eskelund, señaló recientemente que China tiene actualmente la capacidad de producir 50 millones de coches, mientras que su demanda doméstica asciende a los 23 millones de vehículos. Del mismo modo, Eskelund alertó de una "gran discrepancia" entre la capacidad de los 100GW de producción eólica que posee el régimen de Xi Jinping y la demanda doméstica cifrada en 47GW de ese tipo de energía.

Conscientes de esta situación, las firmas chinas no sólo han aumentado las ventas de coches eléctricos hacia Europa, también están explorando otros mercados, como el de Oriente Medio. En este sentido, el pasado mes de julio, Arabia Saudí acordó con Human Horizons, firma automovilística china, la inversión de 5.600 millones de dólares. Paralelamente, el 60% de los vehículos eléctricos vendidos en Israel en los primeros nueve meses de 2023 fueron fabricados por empresas chinas. Los países de esta región quieren avanzar en la transición verde, especialmente aquellos cuya economía depende mucho del petróleo, y China constituye toda una oportunidad.

Por otro lado, si Bruselas certifica la existencia de un mecanismo de competencia desleal basado en las subvenciones, se calculará un impuesto a todas las exportaciones de coches eléctricos desde China hacia Europa, el cual deberá ser pagado por todos los fabricantes, incluidos los occidentales. En este sentido, la investigación de la UE tiene en el punto de mira a empresas como BYD, Saic Motor y Geely, algo que ha generado descontento en Tesla, el mayor exportador de coches eléctricos en suelo chino hacia Europa, y que finalmente no será investigada. La firma de Elon Musk considera que, al no ser objeto de las pesquisas, puede verse obligada a pagar la tasa por las infracciones que otras empresas hayan cometido.

Sin embargo, este no es el único frente que Tesla debe atender, pues la firma de Musk domina el mercado de lujo de coches eléctricos en China y hay novedades en este ámbito. BYD, fabricante chino, ha presentado el nuevo Sea Lion 07, un vehículo que entra en circulación para competir directamente con los coches Model 3 y Model Y de Tesla. La empresa china, que ya superó a la compañía estadounidense como mayor fabricante de coches eléctricos del mundo, quiere arrebatarle el dominio a Tesla sobre el mercado de lujo de estos vehículos.

En definitiva, mientras los exportadores en suelo chino de vehículos eléctricos con destino a Europa esperan el resultado de las investigaciones de la UE, continúan aumentando sus ventas. Paralelamente, y en plena sobrecapacidad de producción china, la pugna entre las principales firmas se recrudece a través del lujo, un segmento clave del mercado de coches eléctricos.