Las bolsas de Asia abrieron al alza el miércoles a pesar del sabor negativo dejado por Wall Street y el miedo generado por la incertidumbre política en Egipto.

El Índice Nikkei de Japón extiende sus ganancias por encima del nivel de los 14.000 puntos para alcanzar un máximo en cinco semanas y el Kospi de Corea del Sur cotiza plano. Sin embargo, el S&P ASX 200 de Australia cedía alrededor de un 0,5 por ciento.

La tensión política en Egipto se intensificó después de que el presidente Mohammed Mursi afirmase que continuará con su deber como primer presidente democráticamente elegido en Egipto, desafiando así el plazo impuesto por los militares para presentar su dimisión.

La agitación en El Cairo hizo mella en Wall Street donde las acciones cayeron por primera vez esta semana. Los precios del petróleo recibieron un impulso, con el crudo estadounidense subiendo por encima de los 100 dólares por barril en el comercio asiático.

Los exportadores japoneses recibieron jarro de agua fría después de que el yen sobrepasase el nivel clave de los 100 yenes por dólar, por primera vez desde el 5 de junio.

Los fabricantes de automóviles Mitsubishi Motor y Mazda Motor subían más del 2 por ciento cada uno, mientras que Nissan Motor se disparaba más de un 3 por ciento. Las ganancias llevaron al Nikkei por encima de los 14.100 puntos, nuevo máximo de las últimas cinco semanas.

Los débiles precios de los metales llevaron al índice de referencia de Sydney a tomarse un respiro tras subir un 2,6 por ciento en la sesión anterior.