Bolsa, mercados y cotizaciones

La bolsa se engancha a la marihuana

  • La marihuana sale del ostracismo y 'echa humo' en bolsa por segundo año
  • Impulsado por la apertura de Canadá al cannabis para uso recreativo

Xavier Martínez-Galiana

Hacia el final de la película británica El jardín de la alegría -así titulada en castellano-, un policía de un pequeño pueblo de Cornualles se presenta en casa de Grace, la protagonista, y le confiesa que, aunque se haya hecho el longuis, está al tanto de sus actividades ilícitas: el cultivo de plantas de marihuana que la mujer, recién viuda, lleva a cabo para intentar pagar las deudas que su difunto marido le ha dejado en herencia.

Desde este miércoles, 17 de octubre, es posible comprar marihuana en Canadá como hasta ahora se adquiría una cajetilla de tabaco en el estanco y se ha abierto un escenario nuevo en el que escenas como las de la película, con policías vigilantes, traficantes y el temor a acabar en la cárcel, son cosa del pasado.

La legalización de la producción y el consumo de cannabis para fines recreativos en Norteamérica -también es legal en nueve estados de Estados Unidos- ha generado mucha expectación y ha disparado las acciones en bolsa de los principales productores en los últimos dos años, pero también ha despertado el interés de los fabricantes de bebidas, conscientes de que sus consumidores quieren descubrir nuevos sabores y ellos aumentar su cuenta de resultados. Coca-Cola está estudiando sus opciones para entrar en este mercado, Heineken, por medio de su filial californiana Lagunitas, comercializa ya una cerveza a la que ha llamado Hi-Fi Hops, que es más bien agua con gas lupulada, no alcohólica y que está elaborada con tetrahidrocannabidiol (THC), un principio psicoactivo de la marihuana.

Pero el gran movimiento estratégico del verano ha sido el de Constellation Brands, que distribuye en Estados Unidos cervezas como Corona y Modelo, además de vinos y otras bebidas espirituosas. La compañía anunció que aumentará al 38% la participación que ya posee en Canopy Growth, el segundo mayor productor mundial de marihuana para fines médicos por capitalización bursátil, con una inversión de 4.000 millones de dólares.

"Su apuesta porque la legalización [del cannabis] cobrará impulso en el mundo, y especialmente en Estados Unidos", es lo que ha movido a Constellation a afianzar su presencia en Canopy, señalan desde Bloomberg.

Aun así, Edward Mundy, analista de Jefferies, no espera que ahora las bebidas no alcohólicas, infusionadas con cannabis, se extiendan más allá de Canadá, dada la regulación actual.

"Es un mercado en plena ebullición que ha descontado de forma exagerada los beneficios futuros"

Conforme la marihuana ha ido saliendo del ostracismo y se ha hecho más presente en la sociedad por sus usos terapéuticos, son varios los índices bursátiles específicos que reúnen a las principales compañías del sector que cotizan en algunas de las mayores bolsas de valores del mundo, como Toronto o Nueva York.

Uno de esos índices es el North American Medical Marijuana Index, que gana en torno a un 27% en lo que va de año, y se revaloriza un 68% desde los mínimos anuales que registró a mediados de agosto. En el índice están reunidas algunas de las firmas de mayor tamaño en bolsa del sector, como las canadienses Canopy Growth (9.600 millones de euros), Aurora Cannabis (7.300 millones), GW Pharmaceuticals (4.200 millones) o Aphria (2.800 millones). Desde comienzos de 2017 algunas de estas compañías han reventado la bolsa con subidas superiores al 200% –más de un 500% en el caso de Canopy Growth-.

Solo este año, los títulos de Canopy se disparan casi un 115% y los de Aurora Cannabis, un 22,3%, y ambos valores reciben una clara recomendación de compra del consenso del mercado que recoge FactSet, aunque seguimiento es bajo. ¿Estamos ante una burbuja? Ante los cambios legislativos en Estados Unidos y Canadá, las expectativas de productores e inversores pasan por que otros países despenalicen la marihuana y así se expanda el mercado.

No obstante, casos como el de Tilray, productor canadiense de cannabis para fines médicos, han levantado suspicacias. La firma empezó a cotizar en el Nasdaq el pasado 20 de julio y, desde entonces, su valor ha subido más de un 1.000%, desde los 17 dólares iniciales hasta los 141 a los que cotizaba el viernes. Su tamaño en bolsa supera los 11.000 millones de euros -es la más capitalizada-.

"Estamos ante un mercado en plena ebullición que en los últimos meses ha descontado de una forma creo que exagerada un crecimiento futuro de beneficios en estas dos compañías [Canopy y Aurora] al calor de la legalización en algunos estados americanos", sostiene el economista e investigador de la Universidad de Essex, Javier Santacruz.

"Me llama particularmente la atención Canopy Growth, que aun estando en pérdidas continuadas, quemar caja como si no hubiera un mañana (a lo Tesla) y con una estructura de financiación cuanto menos dudosa, sin embargo haya tenido la explosión que ha tenido (incluso considerando el efecto divisa del dólar canadiense). Aurora Cannabis está más cara que Canopy pero tiene unas cuentas un poco más saneadas", explica el experto, que añade: "Es una señal clara de que todo depende de que se siga legalizando el consumo en otras partes y tenga éxito rápido, cosa que veo bastante improbable".

Algunos rumores en el mercado apuntan que Coca-Cola estaría interesada en entrar en el capital de Aurora, firma que planea salir a bolsa en Estados Unidos en octubre, del mismo modo que Constellation aumentó su participación en Canopy.

Aurora Cannabis llegó a perder más de un 30% este año, pero ha recobrado fuerza en el parqué. "Un negociador muy prolífico, Aurora le ha echado el guante a su rival MedReleaf, también productor de marihuana con licencia, por 3.200 millones de dólares y a Anandia Laboratories, en una operación por valor de 115 millones", según informa Etan Vlessing, del portal financiero estadounidense Benzinga.

En total, la compañía ha adquirido unas veinte empresas en los últimos dos años y parece que esta será la tendencia en el futuro próximo. "El mercado canadiense verá un aumento de la consolidación de la industria que llevará a menos jugadores, pero más grandes, mientras los productores pequeños y artesanos tendrán dificultades para permanecer en el juego", opina Mark Lakmaaker, vicepresidente de relaciones con los inversores en Aurora Cannabis, en declaraciones recogidas por Benzinga.

Dónde comprar en el mercado

Existe un fondo cotizado o ETF en Canadá y Estados Unidos que replica al North American Medical Marijuana Index. Lo han denominado Horizons Marijuana Life Sciencies y, en el caso del canadiense, lo hace ligeramente mejor que el índice al que replica. Entre sus mayores posiciones están Aurora Cannabis, Canopy Growth y GW Pharmaceuticals, que suman un 40% del total. Además de éste, coexisten el Global Cannabis Stock Index, operativo desde 2013, que incluye 52 valores y se revisa cada trimestre, y el más reciente Green Market Report Index, una lista de 30 valores que se seleccionan por criterios de capitalización bursátil y nivel de ingresos, y que también se revisa trimestralmente.

Perfilando la distribución

En las últimas semanas, las autoridades estatales y provinciales de Canadá han estado perfilando la forma en que los consumidores podrán adquirirla y consumirla, ya que aún hay que delimitar si el consumo estará permitido en zonas públicas o se tolerará sólo en privado. En Ontario, la provincia más poblada y la que recibirá 63 de las 118 licencias de producción concedidas por el Departamento de Salud, el anterior Gobierno liberal otorgó el monopolio en la distribución al Liquor Control Board de Ontario, que planeaba abrir 40 tiendas en el primer año.

Sin embargo, el cambio de Gobierno que trajo a los conservadores dejó de lado esta idea y quiere que las ventas tengan lugar en establecimientos del sector privado. Además, en Ontario y Terranova se permitirán las ventas en las mismas plantas de producción, pero sólo se otorgará licencia para una tienda por cada productor. Eso sí, de momento, y por unos meses, en Ontario sólo se podrá comprar por Internet, aunque en sitios web del Gobierno canadiense.