Bolsa, mercados y cotizaciones

El índice de Internet casi triplica al Nasdaq desde el suelo de las 'puntocom'

  • "La ciberseguridad y la infraestructura en la nube impulsarán el gasto tecnológico"
  • Desde 2002 el Dow Jones Internet se apunta una subida superior al 1.600%

Daniel Yebra

La tecnología ha multiplicado su presencia en todos los aspectos de la vida cotidiana y de la economía en los últimos años, dejando una huella indiscutible en los mercados financieros. El Nasdaq 100, el índice que reúne a las compañías más grandes de este sector, es el más alcista entre los grandes selectivos a nivel global en los últimos años, pero reduciendo el espectro a las empresas relacionadas con Internet la cosecha es tres veces mayor desde el suelo de la burbuja puntocom.

La principal referencia tecnológica se revaloriza más de un 200% en la última década, frente al 71% que lo hace el S&P 500, y sus principales representantes, Apple, Alphabet, Microsoft o Facebook, han desplazado a energéticas como ExxonMobil, a bancos como Citi o a gigantes de la distribución como Walmart como las compañías más grandes del mundo. Mientras, el núcleo de empresas que basan su negocio estrictamente en Internet, como son la red social de Zuckerberg, Amazon, Netflix o la matriz de Google, brillan aún más. De hecho, sus iniciales conforman el acrónimo FANG, un pseudo índice acuñado por el gurú y presentador de la CNBC Jim Cramer que ha demostrado ser imbatible en los últimos tiempos y que hasta la influyente firma de inversión Goldman Sachs ha versionado en su FAAMG (Facebook, Amazon, Apple, Microsoft y Google).

Pero no hace falta reducirlo sólo a estas compañías, ni seguir estos mediáticos selectivos, para descubrir el mejor comportamiento de las compañías cuyo campo de acción es únicamente Internet. El principal índice de Wall Street que reúne a más de 40 de estas empresas tecnológicas, el Dow Jones Internet, casi triplica las ganancias conseguidas por el Nasdaq 100 desde el suelo de la burbuja puntocom, allá por 2002.

Desde entonces, este índice, en el que además de Amazon, Netflix o Alphabet cotizan otros grandes nombres de la Red como PayPal, eBay o Twitter, repunta más de un 1.671%, frente al 640% que lo hace la referencia tecnológica. En los últimos 10 años, la ventaja se queda en más de 100 puntos porcentuales, un 320% frente a un 208%.

¿Desconfianza?

Goldman Sachs destacó recientemente el riesgo que entraña ahora invertir en tecnología, ya que "la baja volatilidad que tienen los valores FAAMG está llevando a los inversores a infravalorar los riesgos, agravando la volatilidad que podría haber a la baja si cambia la situación". Sin embargo, tras el descalabro a corto plazo que produjo esta postura, el mercado volvió a recomponerse y las tecnológicas, y concretamente las compañías de Internet, vuelven a cotizar sin un techo cercano, al menos aparentemente. Para el equipo de analistas de ETF Securities es clave que "la innovación tecnológica sigue siendo una de las principales fuerzas impulsoras de la economía mundial".

La firma de inversión añade, además, que "es probable que temas como la seguridad cibernética, la inteligencia artificial y la infraestructura en la nube sean los impulsores del gasto tecnológico en las próximas décadas" y que "las estimaciones demográficas favorables, especialmente en los mercados emergentes, también proporcionen vientos de cola".

Los analistas ignoran a Goldman

No es de extrañar que los gestores aprovecharan la corrección que provocó Goldman Sachs a mediados de junio para incrementar su peso en tecnología (el Nasdaq 100 llegó a caer un 4% tras conocerse su informe), como admitieron los de T. Rowe Price y los de Federated Investors a Reuters. Jeff Rottinghaus, de la primera gestora, cree que Facebook o Amazon "tienen potencial para seguir creciendo independientemente de la dirección que tome la economía en general".