El freno de las automovilísticas amenaza a Wall Street

Otra amenaza acecha a Wall Street: las ventas de coches están cayendo. No es que sea una correlación exacta, pero la historia demuestra que una disminución de éstas anticipa un freno en el mercado de valores. Y el dato es que, en marzo, gigantes como Ford, General Motors o Fiat Chrysler han anunciado datos decepcionantes de ventas.

"Las ventas de automóviles suelen tener una fuerte correlación con los mercados de valores", indica Jasper Lawler, analista de London Capital Group en declaraciones a Bloomberg. "La caída de las ventas no puede causar un mercado bajista, pero es otro indicador de que los riesgos a la baja están aumentado".

Uno de los obstáculos con los que se ha topado esta industria es con la desaceleración del gasto por parte de los consumidores americanos, ya que en febrero avanzó un tímido 0,1% (el ascenso más reducido desde agosto). Es uno de los factores que ha influido en que el ritmo de ventas anualizado, ajustado por tendencias estacionales, se haya desacelerado hasta 16,6 millones frente a los 17,2 millones esperados, según Autodata Corp.

La consecuencia para el mercado podría ser una excusa más para caer, que se uniría al freno que ha supuesto las menores expectativas sobre la reforma fiscal de Donald Trump. Según recoge Bloomberg, las menores ventas de automóviles en 2011 y 2012 fueron la antesala de descensos en el S&P 500, mientras que una mejoría de éstas en el otoño de 2015 llegaron justo antes de un repunte de este índice.

Y los datos no son nada halagüeños: las ventas de Ford cedieron un 7,2% en marzo; las de Toyota, un 2,1%; las de Honda, un 0,7% y así sucesivamente. Sus ventas no es lo único que está sufriendo, también lo hace sus cotizaciones. De modo que, el mes pasado, las acciones de General Motors y Toyota cedieron más de un 4%; las de Honda, más de un 2% y las de Fiat Chrysler, un 0,36%. Aunque las más penalizadas son las de Ford, que pierden más de un 7%.

Mientras los fabricantes de automóviles más tradicionales sufren, las acciones de Tesla repuntaron más de un 11% en el mismo periodo aupadas por las expectativas en torno a su próximo coche eléctrico, el Model 3, la versión asequible del Model S disponible a partir de los 35.000 dólares. Ese impulso la ha llevado a superar a la propia Ford en capitalización.