Bolsa, mercados y cotizaciones

La caída del crudo 'se come' el 60% del beneficio de las petroleras en un año

  • El desplome del petróleo se lleva una cuarta parte de la capitalización

Laura de la Quintana

El 18 de junio de 2014 el crudo Brent, de referencia en Europa, hacía máximos en las cercanías de los 120 dólares el barril. Hoy ese mismo precio es un 75% inferior.  Y cotiza por debajo de los 30 dólares el barril cuando las estimaciones más alarmistas hablaban hace justo un año de niveles de 40/45 dólares. Lógicamente, para firmas en las que el crudo infla su partida de costes -véase las aerolíneas o el sector automovilístico- esta situación ha pasado a ser la panacea que nadie esperaba alcanzar. Sin embargo, aquellas que ajustaban sus proyecciones en base a precios hasta un 50% superiores al actual -como es el caso de las petroleras-, se han sometido a una brutal rebaja de perspectivas que alcanzará al próximo trienio.

Menor beneficio, menor valor

Las estimaciones de ganancias para las compañías vinculadas con el petróleo se han reducido en un 60% con respecto al cálculo que realizaban los analistas hace justo un año. El consenso de mercado recogido por FactSet prevé un beneficio neto conjunto para este año de 70.190 millones de euros, frente a los 178.000 millones esperados en enero de 2015.

E idéntica situación se repite durante los próximos ejercicios, si bien es cierto que el impacto se va mitigando con el tiempo. De cara a 2017, las ganancias que estimaban los expertos a comienzos de 2015 se contraerán un 42%, hasta los 117.130 millones de euros; casi la mitad de los más de 200.000 millones que, teóricamente, estaban proyectados para el próximo año. Y 2018 todavía se resentirá por el contexto actual. Las estimaciones caen un 20% con respecto a hace un año, hasta un beneficio neto esperado para el conjunto de las petroleras de 144.877 millones de euros.

"A pesar del importante recorte en los costes de producción de estas compañías", sostienen desde UBS, "hemos rebajado el beneficio por acción (BPA) para el conjunto del sector en más de un 40% en 2016 y otro 23% en 2017".  Y una consecuencia más. Las petroleras mundiales han perdido una cuarta parte de su valor en bolsa -unos 500.000 millones de euros- y esto ha provocado, en lo que afecta al mercado español, que Repsol caiga hasta el puesto 23 en el ránking de las mayores firmas de su sector, encabezado por Exxon Mobil, PetroChina y Chevron.

Curiosamente, estos recortes en bolsa están logrando paulatinamente devolver el atractivo del que antes carecía el sector. "Se trata de un momento que parece estar en contradicción con acciones que cotizan por debajo de 10 veces/beneficio (como es el caso de la francesa Total) y que ofrecen rentabilidades por dividendo atractivas y un importante potencial alcista (el scrip de Repsol ofrece más de un 11% de rentabilidad)". En este sentido, ninguna de las diez mayores petroleras mundiales cuenta con recomendación de venta y entre todas ellas presentan un potencial medio alcista cercano al 30% de cara a los próximos doce meses.

Los gigantes del crudo

Sufren y lo hacen en sintonía con el desplome del petróleo, cuyo precio ha caído a la mitad en los últimos seis meses, justo antes del estallido del crash bursátil de Shangái. La firma estadounidense ha visto caer a la mitad su estimación de beneficio para 2016 en el último año, hasta los 13.325 millones de euros; una rebaja de perspectivas que alcanza el 70% en el caso de PetroChina y que lleva hasta las pérdidas a ConocoPhillips, la única de las grandes que cerrará, según el consenso de mercado, el año en negativo: con pérdidas de 22 millones de euros.

Para la española Repsol 2016 será el año en el que sus ganancias superen ligeramente los 1.000 millones de euros, casi la mitad de las previsiones que manejaban los expertos hace justo un año que, además, han revisado a la baja sus estimaciones para el trienio. La firma presidida por Antonio Brufau deberá renunciar a un beneficio superior a los 2.000 millones, cifra que en 2015 los analistas estimaban para el cierre de 2018. Hoy, rebajan el beneficio de Repsol hasta los 1.477 millones en 2017 para superar los 1.800 millones en dos años.

Repsol duplica su autocartera en el último año

La petrolera presidida por Antonio Brufau cuenta hoy con el doble de títulos propios en su poder que los que tenía en enero de 2015, cuando el petróleo cotizaba por encima de los 60 dólares el barril, el doble que su nivel actual. Pero, ¿ha aprovechado Repsol para comprar acciones a precio 'de saldo'? Tan sólo en parte. El pasado 12 de enero, momento en el que sus acciones cotizaban a 9 euros, se hizo con un 0,054 % de sus títulos. Ahora bien, desde que en el mes de julio declarase una autocartera del 0,355 % ha venido realizando compras puntuales durante los últimos meses que arrojan, en cualquier caso, pérdidas, tal y como reconocen fuentes de la propia compañía. Después de caer un 56% desde junio de 2014 (momento en el que comenzó la corrección del petróleo), Repsol cotiza en  mínimos no vistos desde 1996, esto es, 20 años atrás, cuando su acción se intercambiaba a 8,4 euros. El consenso le concede un potencial alcista del 50%.