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El presidente de Zinkia sube el sueldo al consejo en pleno concurso de la compañía

    José María Castillejo, presidente de Zinkia. | <i>N. Martín</i>

    Cristina García, Javier Romera

    José María Castillejo, presidente y primer accionista de Zinkia con un 64,7% de su capital social, en concurso de acreedores desde abril de 2014, sacó adelante este lunes con sus propios votos un plan de retribución variable para el consejo de administración de 600.000 euros, además del reparto de 1,2 millones de acciones entre directivos y consejeros -el equivalente al 5% de la compañía- durante la junta general de accionistas.

    En ella, el presidente de la productora, que tiene en proceso de ejecución sus acciones ante el impago de un préstamo a favor del segundo accionista, Miguel Valladares -por el que Castillejo perdería el control de Zinkia-, autorizó también modificar parte de los estatutos. Se trata de una maniobra que, en opinión de los minoritarios, tiene por objetivo "evadir el control de la compañía".

    Preguntas sin respuesta 

    La junta celebrada este lunes se prometía cargada de preguntas, que acabaron sin respuesta. Según ha podido saber elEconomista, las preocupaciones de los accionistas giraron en torno a dos ejes. El primero trató de cuantificar los ingresos de Zinkia, aún sumergida en concurso de acreedores, después de que el pasado mes de abril anunciase pérdidas por valor de 4 millones de euros en 2014, tras dotar un contrato con Carears Deapers del mismo importe. Según denuncian los accionistas minoritarios, "el pago se pospuso a junio de 2015, sin razón o motivo alguno que lo justifique".

    Sobre este contrato se basa buena parte del plan de viabilidad del grupo. Por ello y ante la falta de información al respecto, los accionistas minoritarios no dudaron en trasladar su inquietud a Castillejo con el objetivo de cuantificar cuáles serían los ingresos que la productora obtendría por esta vía. No hubo respuestas concretas, sólo puertas abiertas a explicaciones futuras. 

    El presidente de la productora, que achaca la delicada situación que atraviesa Zinkia al ruido mediático, también rehuyó abordar la segunda gran incógnita que acecha a los minoritarios: el porqué de una filial en Panamá -el pasado 4 de abril, días antes de anunciar pérdidas, Zinkia comunicaba a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la creación de Zinkia Educational, una filial panameña a través de la que "se desarrollarán algunas de la líneas de negocio internacionales de la sociedad"-. Este lunes no se dilucidaron cuáles.  

    Presuntos delitos societarios

    La junta llegó en medio de la admisión a trámite del juzgado de instrucción número 54 de Madrid de una querella presentada contra José María Castillejo por Miguel Valladares, el segundo accionista de la empresa, que le acusa de administración desleal, apropiación indebida, falseamiento de información económica y financiera de difusión obligatoria, falsedad documental y estafa.

    De acuerdo con el auto dictado por el juez, al que ha tenido acceso este periódico, Castillejo, que aseguró este lunes no tener notificación alguna todavía al ser preguntado durante la junta de accionistas, está citado a declarar en calidad de imputado el próximo 15 de noviembre -sólo tres días después de que se produzca el vencimiento de la deuda que Zinkia emitió entre particulares en el año 2010, por valor de 2,23 millones de euros-.