Los minoritarios acusan a Castillejo de expoliar Zinkia antes de julio

Los accionistas minoritarios de Zinkia, en concurso de acreedores desde abril de 2014, alertan de que José María Castillejo, fundador de la productora y primer accionista, "quiere disponer, sin control efectivo alguno, de los activos, derechos y caja de Zinkia antes de que le ejecuten [sus acciones]".

A través de un comunicado, los accionistas minoritarios denuncian que "José María Castillejo quiere aprobarse a sí mismo el próximo 29 de junio [cuando está previsto que se celebre la Junta General Ordinaria de Accionistas], con el ejercicio de los derechos de voto que aún ostenta y ante su salida inminente de la compañía por la ejecución de sus acciones, convertirse en titular fiduciario de una parte sin concretar de los bienes y derechos de Zinkia, que él mismo administra, tratando de burlar el control de la junta modificando el reglamento, que hasta ahora lo prohíbe expresamente".

Entre las propuestas que José María Castillejo llevará a la Junta General -y que hizo públicas el pasado 25 de mayo- figura la de modificar los estatutos, además de plantear un plan de retribución variable para el consejo de administración de 600.000 euros y del reparto de 1,2 millones de acciones entre directivos y consejeros, que equivalen al 5% de la compañía.

Todo ello después de que Forensic Solutions, la firma encargada de la administración concursal de Jomaca 98 (la sociedad patrimonial del propio Castillejo), diese vía libre a que el segundo accionista de Zinkia, Miguel Valladares, ejecutase las garantías ante el impago de un préstamo que da acceso a Valladares a controlar otro 33% de Zinkia, y que aún está en proceso de formalizarse. Cuando se complete, Castillejo perderá el control de la compañía y Valladares pasará a poseer el 44% de la productora.

"Con los votos a su favor hasta la ejecución de sus acciones, Castillejo pretende aprobar unas cuentas en las que, a través de sus sociedades, reconoce haber cobrado más de medio millón de euros a lo largo de 2014", apuntan los accionistas minoritarios. "Año en el que la situación financiera de la empresa llevó a no poder hacer frente a los pagos comprometidos y, por lo tanto, a presentar el concurso de acreedores", recuerdan.

Además, otra de sus quejas apunta a que Castillejo llega como presidente a la Junta General "por la inacción de los organismos reguladores y de control, la Comisión Nacional del Mercado de Valores y el MAB, así como por la connivencia de la administración concursal de Zinkia, Attest Integra, nombrada a instancias de la CNMV y su representante, José Miguel Calleja Bermejo". Este último, denuncian, permitió crear una filial de Zinkia en Panamá, sin la aprobación de la Junta General ni del juzgado de lo mercantil en el que se tramita el procedimiento concursal de Zinkia, "a la que el propio Castillejo reconoce querer desviar parte de las líneas de negocio".