Bolsa, mercados y cotizaciones
Hacia dónde viran las carteras de los fondos de pensiones españoles
Arantxa Rubio
Después de la vuelta que ha experimentado la renta fija durante los últimos meses, los gestores siguen incrementando su exposición a la renta variable, pero mejor en Europa.
El paradigma de inversión en los planes de pensiones en España ha cambiado. La renta variable empieza a cobrar protagonismo en sus carteras en detrimento de la renta fija, un viraje que ya se empezó a observar a cierre del año pasado. La explicación no es difícil: tras las inyecciones de liquidez proporcionadas por los bancos centrales, las bolsas acumulan importantes subidas, mientras que el rally de la deuda ha dado claros síntomas de agotamiento -de hecho, un 96 por ciento de los fondos de renta fija global cae en el último mes-. Por eso, no es de extrañar que los fondos de pensiones (donde se incluyen los planes de pensiones del sistema individual más los planes de empleo) tengan la exposición más elevada a renta variable en sus carteras desde el año 2007. Según los datos de Inverco, al cierre del primer trimestre este activo suponía el 22 por ciento de sus carteras, del que un 13,44 por ciento es bolsa extranjera y un 8,96 por ciento española.
En paralelo a esto, la exposición a la renta fija era, según estos datos, del 58 por ciento al cierre de marzo. Se trata del porcentaje más bajo de los últimos ocho años y se aleja, así, del máximo marcado en 2011 y 2012 del 63 por ciento (entonces, la rentabilidad del bono español a diez años desató todas las alarmas al superar el 7 por ciento).
El Barómetro de las pensiones privadas en España, realizado por Kessler-Casadevall con la colaboración de elEconomista a catorce entidades gestoras, refleja este sentimiento: un 50 por ciento de ellas piensa reducir su exposición a bonos durante los próximos tres meses (el dato más elevado desde que se realiza).
Resultados científicos
Esta encuesta, que se lleva a cabo trimestralmente, es un sondeo de inversiones realizado con criterios científicos, lo que proporcionan solidez a los resultados. Es representativa al cumplir los siguientes requisitos: cubre como mínimo el 75 por ciento del patrimonio de planes de pensiones que hay en España, siempre utiliza el mismo panel y la tasa de respuestas es del cien por cien cada trimestre. Unas condiciones sin las cuales el barómetro no podría ser utilizado como un resultado representativo de la industria de pensiones privadas en España.
Su objetivo es que pueda ser utilizada como un benchmark, es decir, un índice de referencia por las gestoras. De este modo, a través de los resultados que arroja, las firmas podrían comparar sus propios resultados con los de la competencia y descubrir así tendencias de inversión.
Una crítica a la industria de pensiones
En opinión de Javier Kessler y Juan Manuel Vicente Casadevall, socios fundadores de Kessler & Casadevall Asesoramiento Financiero, "se trata de una iniciativa para aumentar la transparencia y profesionalizar el sector, muy cerrado y con poca competencia en España". De hecho, de los 104.500 millones que hay aproximadamente en planes de pensiones en España, según Inverco, casi la mitad del pastel se lo comen entre Vidacaixa y BBVA Pensiones.
En este sentido, desde Kessler-Casadevall insisten en que "las pensiones privadas en nuestro país necesitan especializarse", y apuntan a que este barómetro (que ya cuenta con tres años de vida) "sería mucho más útil si el sector fuera más competitivo y mucho más grande", dictaminan en este sentido. Una voluntad que esperan se convierta en una realidad próxima: "Mi objetivo es que esto siga en marcha dentro de unos años y el sector sea mas competitivo. Habrá competencia real entre las gestoras de pensiones y la encuesta será mucho más representativa", sugiere Casadevall.