La OPEP+ quiere inyectar otros 411.000 barriles de petróleo en agosto y el barril borra la subida del viernes

La Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus socios externos, el cártel conocido como OPEP+, parece haber tomado la decisión de repetir el incremento de oferta de crudo que se ha llevado a cabo en mayo, junio y julio: 411.000 barriles más de producción que llegarán a un mercado que, ya de por sí, está bien abastecido. El aumento de oferta ha generado una reacción en el mercado, y el barril Brent europeo ha borrado todas las subidas que experimentaba el viernes. Si la OPEP+ continúa aumentando la oferta a este ritmo habrá alcanzado el objetivo que se marcó en diciembre de 2024 un año antes de lo previsto.

Cuando la OPEP+ decidió hace siete meses que empezaría a abrir los grifos de la producción de petróleo, y que revertiría el recorte de oferta que ha mantenido en los últimos años, se marcó un objetivo en el calendario: aumentar la producción 2,2 millones de barriles diarios, con fecha límite en septiembre de 2026. Sin embargo, el proceso ha sido mucho más agresivo de lo que se esperaba, y ahora todo apunta a que se completará en septiembre de este mismo año.

La OPEP+ tiene su próxima reunión programada para el 6 de julio, y en ese encuentro decidirá que vuelve a aumentar la oferta, por cuarta vez consecutiva, en 411.000 barriles diarios. Estos nuevos barriles se incorporarán a los que ya ha inyectado en el mercado en mayo, junio y julio, y harán que el aumento de oferta en los últimos meses alcance los 1,644 millones de barriles diarios.

Esta decisión se habría tomado en los últimos días, y en la tarde del viernes se ha filtrado a la agencia Bloomberg. La reacción del petróleo en el mercado no se ha hecho esperar: el barril Brent europeo ha pasado de subir en torno a un 1%, a caer un 0,4% en la sesión, una reacción que demuestra que no todo este aumento de producción estaba descontado por los inversores.

Además, asumiendo que la OPEP+ seguirá teniendo prisa con el proceso de aumento de producción, como ha demostrado en los últimos meses, esto supondrá que el objetivo de aumentar la producción 2,2 millones de barriles diarios se completará entre septiembre y octubre de este año, un año antes de lo previsto.

La decisión de la OPEP+ llega en una semana de fuertes caídas para el crudo. Los mercado se han calmado tras diluirse el conflicto entre Israel e Irán en Oriente Medio, y el Brent ha pasado de cotizar por encima de 80 dólares en el arranque de la semana, a caer hasta los 67,5 en los que se mueve a media sesión de bolsa estadounidense.

Incluso, desde la agencia Bloomberg ahora se especula con que Rusia, uno de los huesos duros en las negociaciones del cártel en los últimos meses para abrir los grifos del petróleo, ahora está de acuerdo con llevar a cabo este incremento de producción. Arabia Saudí es quien ha llevado las riendas de este proceso, y ha sido quien ha presionado al resto de productores para que este acuerdo se lleve a cabo.

La intención de Arabia es recuperar la cuota de mercado que perdió en los últimos años, cuando sacrificó su propia producción para tratar de mantener altos los precios del crudo. Otros posibles motivos que se barajaron es la intención de Arabia de castigar a los productores de la OPEP+ que no cumplieron con sus compromisos en los últimos años, y también, contentar al gobierno estadounidense, después de que Donald Trump haya insistido en varias ocasiones en los primeros meses del año en su intención de forzar a la OPEP+ a que mantenga bajos los precios del crudo.

Sea cual sea el motivo, la realidad es que la OPEP+ ha demostrado su disposición a recuperar su cuota perdida, incluso si eso supone hundir los precios del barril.