Bolsa, mercados y cotizaciones
El dólar taiwanés está mandando una señal al resto del mundo: "Podría ser el comienzo de algo más grande en los mercados de divisas"
- La moneda de Taiwán llega a registrar su mayor repunte diario desde 1988
- Al especularse con que las autoridades la fortalecerán para contentar a EEUU
- Lo ocurrido telegrafía un cambio de régimen en los flujos mundiales de capital
Mario Becedas
Una divisa, a priori, bastante random, como se dice ahora, dentro el circuito de las principales monedas del mundo está llamando estos días la atención de los mercados financieros. Se trata del nuevo dólar taiwanés (simbolizado por el ticker TWD en el mercado Forex). Su alocado repunte en las últimas sesiones frente al dólar estadounidense, llegando a registrar su mejor jornada desde finales de los 80, se puede resumir como una 'pequeña tormenta' que evidencia algo más grande: el cambio de régimen global que puede llegar detrás de la agresiva política comercial que está desplegando la nueva administración de EEUU.
Los hechos puros pasan por un dólar de Taiwán experimentando una sorprendente apreciación de más del 6% frente al dólar estadounidense (USD) en las dos últimas sesiones (viernes y lunes). El cruce USD/TWD cayó hasta 29,50 en un momento dado, el nivel más bajo desde junio de 2022. Este lunes, el dólar local llegaba a subir hasta un 5%, anotándose la mayor subida diaria desde 1988. El vertiginoso rally -especialmente tratándose de divisas- impulsó a otras divisas regionales, como el el ringgit malasio (MYR), el won surcoreano (KTW) o el baht tailandés (THB).
Detrás de esta repentina y aparentemente insaciable demanda de dólares taiwaneses, coincidían enseguida los analistas, estaba la especulación de que las autoridades taiwanesas permitirán que la moneda se aprecie como gesto para alcanzar un acuerdo comercial con EEUU tras la sacudida del Día de la Liberación y la posterior pausa de tres meses con los aranceles. El Tesoro estadounidense ha venido considerando que el TWD está infravalorado y, en el último informe de noviembre de 2024, mantuvo a Taiwán en su lista de supervisión de manipulación de divisas, junto con China, Japón, Corea del Sur, Singapur, Vietnam y Alemania.
El presidente del país, Lai Ching-te, intervino el lunes para calmar las preocupaciones del mercado, afirmando que el creciente superávit comercial de la isla con EEUU reflejaba principalmente la demanda estadounidense de tecnología taiwanesa (el gigante de los chips TSMC es el emblema de la isla), en lugar de estar alimentado por el tipo de cambio. Asimismo, la oficina de negociaciones comerciales de Taiwán declaró ayer que la semana pasada concluyó la primera ronda de negociaciones para la reducción de aranceles con EEUU y que en las conversaciones no se tocó el tema de la divisa, según informó la oficina en un comunicado.
Pero en los mercados impera la visión de que las autoridades taiwanesas cederán. "Se espera que la gestión del tipo de cambio forme parte de cualquier pacto comercial. Taiwán ha cumplido dos de los tres criterios que el Tesoro estadounidense utiliza para identificar prácticas desleales en materia de divisas. Estos criterios son: 1) un superávit comercial significativo con EEUU de al menos 15.000 millones de dólares en los últimos 12 meses; 2) un superávit por cuenta corriente significativo de al menos el 3% del PIB en los últimos 12 meses; y 3) una intervención persistente y unilateral en el mercado de divisas", explica Charlie Lay, estratega de divisas de Commerzbank en una nota para clientes. Cabe recordar que Trump que ya castigó a Taiwán con un tentativo arancel del 32% en su pizarrín del Día de la Liberación.
Un dólar americano más débil en el cruce haría más competitivas las eventuales exportaciones de EEUU a Taiwán y más onerosas las importaciones, facilitando, sobre el papel, un equilibrio en la balanza comercial entre ambos países, la gran viga maestra de la agenda que está desarrollando Trump 2.0. Es de suponer que en Taipéi no querrán contrariar a un Washington que sigue siendo el mayor valedor internacional de la isla ante la perenne amenaza de invasión por parte de China.
Esta apuesta fue lo que precipitó las cosas en las últimas 48 horas. El movimiento se vio impulsado por unos exportadores que se apresuraron a convertir sus tenencias de dólares estadounidenses a la moneda de la isla y se fue 'de madre' cuando entraron en juego las aseguradoras del país. "El detonante fue la preocupación generalizada entre las empresas e inversores taiwaneses ricos en dólares (sobre todo seguros de vida) de que un acuerdo comercial con EEUU incluya la petición de un dólar americano más débil frente al taiwanés", explica Francesco Pesole, analista de divisas en ING.
"Lo que empezó como un goteo se convirtió en entradas masivas de capital. Se calcula que las compañías taiwanesas de seguros de vida poseen unos 767.000 millones de dólares en activos extranjeros, de los cuales unos 300.000 millones en bonos del Tesoro estadounidense. Dados los tipos más altos del dólar americano, los costes de cobertura son elevados y estas empresas no suelen cubrir sus tenencias de dólar de EEUU. Por ello, la fuerte apreciación del dólar local puede tener ramificaciones negativas en sus resultados", amplía la reconstrucción del 'crimen' Lay, de Commerzbank.
Las coberturas en dólares de EEUU suelen ser costosas, lo que tiende a disuadir a inversores como las aseguradoras de vida de contratarlas. En los últimos años, las empresas se han beneficiado del fortalecimiento del dólar gracias a la falta de coberturas, pero con la reciente caída del billete verde se enfrentan a posibles pérdidas y problemas de liquidez. Según estimaciones de Bank of America, las aseguradoras de vida taiwanesas sólo cubrían el 65% de sus activos a finales del año pasado.
Todo esto, prosigue Lay, se vio reforzado por el hecho de que el banco central de Taiwán, habitualmente cauto y vigilante, no intervino para frenar la subida del dólar local: "El banco central vigila de cerca la divisa y su ausencia fue más que notable". El organismo celebró ayer una rueda de prensa de urgencia, pero se limitó a afirmar que la salvaje apreciación se debía en parte a los chascarrillos del mercado y a tachar de irresponsables estas especulaciones.
Un punto de inflexión crítico
Hecha la 'foto fija' de lo acontecido en las últimas horas, los analistas concuerdan en que detrás de la misma hay 'algo más'. "Se habla de la prisa por vender dólares del mercado exportador y de la falta de una respuesta significativa del banco central, pero esta tendencia podría ser el comienzo o una señal de algo mayor en los mercados de divisas", escribe Brad Bechtel, responsable mundial de divisas de Jefferies en una nota de investigación.
Para Pesole, de ING, la reciente caída del dólar estadounidense significa que países como Taiwán, que históricamente han estado muy expuestos a activos denominados en en el billete verde, se han visto afectados por el cambio de divisas, y los actores locales buscan ahora una mayor cobertura del mismo, además de empezar a diversificar sus inversiones fuera de EEUU. "Esto se enmarca en un panorama bajista más preocupante para el dólar (estadounidense) y abre el riesgo de que un periodo de acuerdos comerciales con países asiáticos supuestamente positivos para el dólar se convierta en una oportunidad para que los países asiáticos ricos en dólares reduzcan su exposición al dólar", razona el experto.
Los estrategas de BCA Research elevan el tono de advertencia: "La subida del dólar taiwanés refleja un cambio de régimen en los flujos mundiales de capital que apoya a la deuda pública de los mercados emergentes asiáticos. Mientras que la primera oleada de debilidad del dólar americano benefició principalmente al euro y a otras divisas de mercados emergentes, el movimiento del dólar taiwanés sugiere que el capital se está repatriando, y no sólo reasignando a través de las fronteras".
Para la casa de análisis, todo esto marca un "punto de inflexión crítico". En primer lugar, señalan, las perturbadoras políticas comerciales y fiscales de la administración Trump están erosionando el atractivo de los mercados financieros estadounidenses. En segundo lugar, argumentan, los inversores están bloqueando las ganancias después de un prolongado repunte en las acciones tecnológicas estadounidenses, reconociendo que el ciclo global está cambiando. El hecho de que los flujos de divisas de Taiwán están impulsados principalmente por aseguradoras de vida privadas y no por actores soberanos añade credibilidad a esta rotación, defienden en BCA.