Bolsa, mercados y cotizaciones

Los inversores agresivos y moderados ganan en un trimestre la mitad de lo esperado para todo 2025

  • Los perfiles que invierten en bolsa ganan entre un 2,30% y un 2,70%
  • Los defensivos, con mucha renta fija, son los únicos que quedan rezagados
Imagen: Alamy.

María Domínguez

A sólo unos días de que finalice el primer trimestre de 2025, los inversores que se posicionan, en mayor o menor medida, en bolsa, están cumpliendo con creces con las expectativas de revalorización de sus carteras para este año. Pese a que el ejercicio ha arrancado muy volátil debido a la guerra arancelaria emprendida por el presidente de EEUU, Donald Trump, la renta variable está jugando a favor de los perfiles que toman riesgo.

Es cierto que en las últimas semanas hemos asistido a una corrección de la bolsa estadounidense -que llevaba meses en territorio de burbuja-, pero esas caídas de Wall Street se han visto compensadas en las carteras por el buen comportamiento de la bolsa europea. El EuroStoxx 50 acumula una subida cercana al 11% en el año, y el Stoxx 600 supera el 8%. Ahí está la clave de que los perfiles más arriesgados se anoten ya un 2,70% en lo que llevamos de ejercicio; es decir, en sólo un trimestre han conseguido la mitad de toda la ganancia que se les pronosticaba para el conjunto del año (un 5,5%). "No es momento de ir con todo": Europa aún no ha alcanzado la zona de compra.

Estos perfiles, los agresivos, son los que invierten todo o casi todo su patrimonio en bolsa y apenas nada en renta fija. Pero no les va bien sólo a ellos. Los perfiles denominados flexibles (que invierten hasta un 80% en bolsa, no más) se embolsan un 2,45%, que también es la mitad de todo lo que tendrían que conseguir a lo largo de todo 2025. Y los moderados (con carteras que son mitad bolsa, mitad renta fija) consiguen un 2,30%, es decir, más de la mitad del 4,4% que se les anticipaba para el conjunto de 2025. Las 'Siete Magníficas' saldrán a flote: Las tres opciones de compra en mercado bajista.

Las cosas son muy distintas para los inversores más defensivos, aquellos más reacios al riesgo, un perfil muy habitual entre los clientes españoles. Sus carteras están integradas en su totalidad, o casi, por renta fija. Apenas se anotan un 0,50% en lo que llevamos de 2025, con lo que tendrán que pisar el acelerador para llegar al 3,9% que se esperaba para el año.

Estas ganancias obtenidas por cada perfil reflejan la rentabilidad media que han registrado por los fondos mixtos de cada una de esas cuatro categorías (defensivo, moderado, flexible y agresivo) en el año, con datos de Morningstar a 18 de marzo. Por su parte, la estimación de subida para el conjunto de 2025 está calculada en base a la inversa del PER (multiplicador de beneficios) de las bolsas europea y estadounidense, y de la rentabilidad esperada para el índice de bonos globales (Bloomberg Global Aggregate) a fecha 30 de diciembre de 2024.

Caída del precio de los bonos

El mal comportamiento de las carteras más conservadoras se explica por el bajón que ha experimentado el precio de los bonos soberanos en el Viejo Continente. En las últimas semanas, el mercado de renta fija ha sufrido un severo ajuste, especialmente en Europa. El índice de deuda europea (el Bloomberg Euro Aggregate Index) se ha dejado, por precio, un 1,75% sólo en marzo. El Bund alemán -el activo libre de riesgo europeo- ha visto cómo su rentabilidad (que se comporta de forma opuesta al precio) se disparaba hasta el 2,78%, desde el 2,40% donde arrancó el mes, e incluso en algún momento ha estado en el 2,9%, arrastrando a las referencias de deuda de la región.

El anuncio de que Alemania destinará 500.000 millones de euros a infraestructuras en doce años, y la expectativa de que inunde el mercado con deuda, entre otros factores, ha tirado a la baja de los precios de los bonos. Esto es una mala noticia para los inversores más expuestos a la renta fija soberana europea, que han visto cómo sus carteras volvían a teñirse de rojo; pero, al mismo tiempo, esas caídas por precio abren una oportunidad para posicionarse en este activo. "Vemos una oportunidad de compra en renta fija europea, tanto soberana como corporativa", explicaba a elEconomista.es Victoria Torre, responsable de Oferta Digital de Self Bank. "Existe una oportunidad de entrada, porque el mercado descuenta un escenario prácticamente idílico, y un Bund cerca del 3% ya es una inversión muy interesante", añadía David Ardura, director de inversiones en Finaccess Value.

"La decisión de Alemania de aprovechar su gran estímulo fiscal también podría tener efectos indirectos positivos para el crecimiento en Francia y el Reino Unido. Ambos países tienen una capacidad de producción militar y de defensa comparativamente más fuerte, incluida la disuasión nuclear", señalan Thomas Gillet y Eiko Sievert, analistas del sector público y soberano de Scope Ratings, que añaden que esto "podría traducirse en tasas de crecimiento ligeramente superiores".

En Estados Unidos, señalan desde Edmond de Rothschild AM, aunque el Senado ha logrado prorrogar el presupuesto hasta septiembre, "algunas decisiones de la Administración Trump avivan la inquietud sobre la economía" tras las decepcionantes cifras de ventas minoristas y los indicadores de confianza. "A pesar de la ligera recuperación de las ventas al por menor en febrero, las cifras solo subieron un 0,2%, por debajo del 0,6% esperado", señalan. Esto "contrasta con el optimismo reinante en Europa tras la decisión de Alemania de impulsar el gasto" con ese fondo de medio billón de euros. "El plan supone un espaldarazo para Alemania y Europa, y ha hecho subir a los mercados europeos de renta variable. Sin embargo, hay que ser prudentes sobre cuándo se gastará realmente el dinero", advierten desde la gestora.