Los planes de empleo vuelven a ver la luz: reciben aportaciones netas por primera vez en 13 años
- Cerraron el año pasado con entradas de dinero por valor de 167 millones de euros
- El nuevo plan de la construcción ayuda a incrementar el volumen de aportaciones
Ángel Alonso, José Miguel Arcos
Madrid,
Los planes de empleo vuelven a ver algo de luz al final del túnel. Según Inverco, el año pasado cerraron con captaciones netas por valor de 167 millones de euros, después de trece ejercicios en que las entradas de dinero no superaban las salidas, por lo que siempre terminaban con saldo negativo. Este dato contrasta con el de los planes individuales, que siguen experimentando reembolsos netos, esta vez de 765 millones, afectados por el límite de 1.500 euros de aportación por partícipe.
Pero 2024 ha significado un punto de inflexión para los planes de empleo. La entrada en escena de los nuevos planes simplificados, dirigidos a sectores profesionales a través de asociaciones, organizaciones, colegios profesionales y autónomos, ha supuesto un pequeño revulsivo, sobre todo a raíz de la puesta en marcha del plan destinado al sector de la construcción, que se ha convertido en el más grande en España por número de ahorradores, con más de 622.000 partícipes, por delante del plan de la Administración General del Estado, que cuenta con 479.947 partícipes. Un éxito que se debe a la filiación de alrededor de 60.000 empresas de la construcción.
Este plan, gestionado por VidaCaixa, la gestora de planes de pensiones y seguros de CaixaBank, terminó el año pasado con un patrimonio cercano a los 142 millones de euros, de los que 139,5 millones se corresponden a las aportaciones netas que recibió desde su creación. Y con este volumen es, con diferencia, el más grande de los 48 planes simplificados que están registrados en la actualidad, según Inverco.
José Luis Manrique, director de estudios de Inverco, explica que aparte de los flujos logrados por el plan de la construcción y el de los autónomos, que obtuvieron 134 millones, se ha notado una reducción en las prestaciones del resto de los planes de empleo (150 millones menos que el año anterior), mientras que las aportaciones se han mantenido, aunque en menor magnitud.
"Es una buena noticia que tras 13 años, los planes de empleo tengan flujos positivos. En la medida que se vayan consolidando los planes de pensiones sectoriales en los convenios colectivos [hay varios sectores con las negociaciones abiertas], esta tendencia se intensificará permitiendo un desarrollo real del segundo pilar", apunta.
Aparte de los planes simplificados, la revalorización del mercado ha permitido que el patrimonio de los planes de empleo aumentara casi un 6% en 2024 respecto al ejercicio anterior, hasta llegar a los 38.819 millones de euros.
De hecho, el buen comportamiento de los mercados permitió que los planes individuales hayan podido incrementar su volumen casi un 9%, hasta los 92.248 millones, pese a los reembolsos netos que sufrieron una vez más.
La lentitud de los fondos de pensiones de promoción pública en arrancar sigue penalizando al conjunto del sistema y únicamente la revalorización de los activos permite un incremento patrimonial.