Bolsa, mercados y cotizaciones

Qué hacer con los bonos 'high yield' después de la subida del 9% que llevan ya en 2024

  • Puede ser buena idea seguir en ellos, especialmente si son de empresas de EEUU
  • Algunos expertos creen que este activo sigue siendo una buena oportunidad 
  • Otros consideran que la prima que ofrece ya no merece la pena
Imagen: Istock.

María Domínguez

El high yield es la categoría de deuda que más ganancias arroja para el inversor en 2024. Los bonos globales de alto rendimiento se revalorizan un 8,7% en lo que llevamos de año, tal y como muestra el índice Bloomberg Global High Yield. Este subidón contrasta con el tímido 0,5% que repunta su homólogo para la deuda 'estándar' (el Bloomberg Global Aggregate, representativo de una cesta de deuda global con grado de inversión).

En lo que respecta al high yield, no solo el global lo hace bien. Esa es la categoría más alcista en el año, pero el segundo segmento que mejor lo hace es el high yield paneuropeo, que se anota un 7,6%. Y la tercera categoría que más sube, el high yield corporativo estadounidense. Las rentabilidades que ofrecen estos bonos a vencimiento superan el 7% el caso de los globales y los de EEUU, y rebasan el 6% para los paneuropeos.

Está claro que los coloquialmente denominados bonos basura lo están haciendo mejor que el resto en 2024. Este tipo de deuda, que no veremos en las carteras más conservadoras, paga más a los inversores por su mayor riesgo de impago respecto al grado de inversión (ya que sus emisores son compañías más vulnerables). Ahora bien: con todo lo que han corrido ya estos bonos ¿el inversor que lleve meses con ellos en cartera tiene motivos para mantenerlos, o es hora de moverse hacia otros activos? Entre los expertos existe diversidad de opiniones. Y en el mercado hay, al alcance del particular, fondos enfocados tanto en esta deuda como en el grado de inversión, que consiguen subidas de hasta casi el 13%, los primeros, y del 9%, los segundos.

Antonio Aspas, socio y consejero de Buy & Hold, señala que "el high yield históricamente da algo más de rentabilidad que el grado de inversión, pero con mayor volatilidad. Pero, en el momento actual, lo cierto es que la prima de riesgo de los índices high yield [la rentabilidad extra que ofrecen respecto a los bonos soberanos] se encuentra en la parte baja del rango histórico". Esa prima se ha situado, de media, en torno a los 4 puntos porcentuales, y ahora estamos cerca del 3%; "En los momentos en que ha existido menos miedo en el mercado, el diferencial cayó hasta los 2,6 puntos, y en momentos de estrés puede irse fácilmente a 6 puntos porcentuales", explica Aspas.

Víctor Alvargonzález (Nextep Finance) "El 'high yield' lo vemos más apropiado para EEUU que para Europa"

Por sectores, en todos ellos los diferenciales ya están "bastante ajustados"; el petrolero ofrece algo más de rentabilidad por estar expuesto a un mayor riesgo, pero el bancario, que es el más relevante en este tipo de deuda, no ofrece una gran oportunidad en este momento: "Los cocos [bonos contingentes convertibles], que hasta hace un par de años te daban fácilmente 5, 6 o 7 puntos más que un bono senior de la misma entidad, ahora ofrecen bastante menos, entre 3 y 4 puntos", añade el socio de Buy & Hold. De ahí que este experto apunte a la opción de moverse hacia bonos más seguros.

"El high yield se vende como renta fija, pero en realidad es un activo intermedio entre la renta fija y la variable", advierte Víctor Alvargonzález, socio fundador de Nextep Finance. "Aunque sea un bono, en lo que estás invirtiendo es en la salud financiera de una empresa y en su futuro. De alguna manera estás apostando por que esa empresa mantenga sus pagos, pero hay un problema: son compañías con riesgo", añade. Las Letras del Tesoro a 12 meses están cerca de perder el 2,5% de rentabilidad.

¿Qué hacer si uno ya está invertido? Depende de la región. Los impagos aumentan cuando hay recesión, de ahí que Alvargonzález considere adecuado mantenerse en bonos high yield de Estados Unidos, "donde el riesgo de recesión es, de momento, bajo o casi nulo". Por el contrario, ese riesgo es mayor en Europa. "El alto rendimiento lo vemos más apropiado para Estados Unidos, mientras que en Europa se puede obtener una rentabilidad muy buena con el investment grade, y corres menos riesgo", resume Alvargonzález. En cualquier caso, el fundador de Nextep Finance prefiere, ya puestos tomar riesgo, la renta variable al high yield (por muy bien que lo haya hecho este año, en ningún caso sube tanto como los índices bursátiles).

Menos riesgo que la bolsa

No todas las voces van en la misma línea. Erick Muller, responsable de producto y estrategia de inversión de la gestora independiente Muzinich & Co, especializada en renta fija corporativa, apunta al high yield y a la deuda emergente como las grandes oportunidades de cara a 2025, ya que los cupones siguen siendo altos en un entorno en el que la salud financiera de las compañías sigue siendo buena. "Considerando cómo están las valoraciones de la bolsa, la renta fija corporativa ofrece un gran atractivo a cambio de un riesgo mucho menor que la renta variable", defiende. La firma prevé una clara ralentización del crecimiento que, de momento, no se transformará en una recesión.

Desde UBP son positivos con el crédito, "ya que un mundo con un elevado crecimiento del PIB nominal probablemente permitirá que las tasas de incumplimiento se mantengan en niveles de un solo dígito bajo, donde han estado durante el año pasado. Si bien han existido temores sobre los riesgos de refinanciamiento dentro del alto rendimiento, éstos se han reducido a medida que las empresas han podido cancelar su deuda y los tipos de interés han empezado a normalizarse, en cierta medida". De ahí que el high yield sea "una opción a considerar para incorporar en una cartera".

En palabras de Roman Gaiser, jefe de Renta Fija y High Yield en EMEA de Columbia Threadneedle Investments, "tras la subida de los tipos de interés por parte de los bancos centrales en 2022 y 2023, la renta fija ha vuelto a cobrar interés con el high yield europeo como una atractiva alternativa de inversión de menor volatilidad que la renta variable, algo a tener en cuenta tras la fuerte subida reciente de los mercados de renta variable y considerando el riesgo potencial de desaceleración económica". En los últimos más de 20 años, el high yield europeo ha superado a largo plazo a otras clases de activos de renta fija, así como a la renta variable, explica Gaiser.