Bolsa, mercados y cotizaciones
La volatilidad marca mínimos no vistos en el último año
- El índice del 'miedo' baja de los 20 puntos por primera vez desde marzo de 2020
Xavier Martínez-Galiana
Este martes se cumplió un año del día en que la volatilidad se disparó en plena tormenta bursátil tanto en Estados Unidos como en Europa. El índice Vix, también conocido como índice del miedo y ligado al comportamiento del S&P 500, alcanzó los 82,69 puntos, un nivel sin precedentes en la historia de este indicador.
"El índice es prospectivo, lo que significa que solo muestra la volatilidad implícita del S&P 500 durante los siguientes 30 días", explican desde IG. "Si el valor del Vix aumenta, es probable que el S&P 500 caiga, mientras que si el valor del Vix disminuye, es probable que el S&P 500 se mantenga estable", añaden.
En la sesión del martes, el indicador descendió hasta la zona de los 19,6 puntos, su nivel más bajo del año y también el menor desde la gran corrección bursátil que lo impulsó por encima de los 82 puntos en marzo del año pasado.
En enero, el índice subió un 45,4% hasta los 37,21 puntos, en los días en que la aparición de las variantes británica y sudafricana del coronavirus atemorizaban a los inversores por el riesgo a detener de nuevo la economía mundial.
Sin embargo, desde ese repunte a comienzos del año perdió un 15,5% en el mes de febrero y siguió cayendo en marzo hasta su nivel actual. De hecho, ha registrado caídas en los últimos seis días consecutivos. Si sigue a la baja, transmitiendo la tranquilidad del mercado, todavía podría ir a buscar la zona de 12 puntos que llegó a marcar a principios de 2020, antes de que los casos de Covid-19 empezasen a multiplicarse fuera de China.
La volatilidad prende tan rápido como la mecha de un petardo, y cualquier acontecimiento mundial podría acelerar la intranquilidad de los inversores
Cuando el índice Vix batía récords sobre los 82 puntos, ese mismo día el S&P 500 se hundió un 12% en el parqué y cayó a las 2.386,13 unidades, situándose muy cerca de los 2.237,4 puntos, el suelo de la corrección que tocó el 23 de marzo. Ese mismo día, el VDax, el índice que mide la volatilidad de la referencia de la bolsa alemana, se elevó hasta los 86,01 puntos, un nivel no visto en años y que ahora discurre por la zona de los 18,96 puntos, otro mínimo anual.
La volatilidad prende tan rápido como la mecha de un petardo, y cualquier acontecimiento mundial podría acelerar la intranquilidad de los inversores. Desde el aumento de la rentabilidad del bono, como se vio hace unos días, a un empeoramiento de la crisis sanitaria provocada por la pandemia o cualquier ajuste de calado en la economía china, por ejemplo, el índice del miedo tendría motivos suficientes para volver a sonar la alarma.