El barril 'Brent' llega al cierre de julio en la casilla de salida

En un solo día el petróleo ha perdido todo lo ganado en un mes. Este jueves, tras la publicación del dato de PIB de Estados Unidos, y teniendo en cuenta también la que se hizo en Alemania en el mismo sentido, los activos de riesgo reaccionaron con pérdidas ante la debilidad en el crecimiento económico, mayor de la esperada, que han mostrado los dos países.

El barril de petróleo Brent llegó a perder un 5,4% en la sesión, volviendo a cotizar en el entorno de los 42 dólares, los niveles en los que arrancó el mes de julio el barril europeo.

A pesar de todo, se puede considerar que ha sido un mes tranquilo para el barril, teniendo en cuenta la fuerte volatilidad que se había visto en los mercados durante los meses anteriores, cuando el precio del crudo ha sufrido el castigo del Covid-19, y posteriormente la bendición del recorte de producción de la Organiación de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).

Al cierre de las bolsas europeas la recuperación desde mínimos del año del barril Brent era del 121%, todavía con pérdidas del 35% desde el inicio del año, y el mercado de futuros parece seguir descontando que los próximos meses serán relativamente estables para el barril europeo, con los contratos de futuro que vencen en diciembre en 43,5 dólares, solo un 1,6% por encima de los precios del contrato de referencia en este momento, el que vence en septiembre.

"Parece que el mercado se está estableciendo en una nueva normalidad en el entorno de los 40 dólares el barril", explican desde Price Futures, y avisan de que, para salir de este rango de precios y poder volver a la parte alta de los 40 dólares, "es probable que se vaya a necesitar otra inyección de estímulos".

"El mercado se está estableciendo en una nueva normalidad en el entorno de los 40 dólares el barril"

Eso sí, también hay expertos que avisan de que "los preocupantes datos económicos de las últimas horas están pesando en los mercados", destacan desde Again Capital, quienes consideran que "las fuertes caídas en el PIB de Alemania y de Estados Unidos no casarán bien con la demanda de gasolina", indican.