Internacional
Millones de personas en EEUU y México siguen sin luz por el temporal de nieve que azota norteamérica
- Buena parte de las centrales térmicas están paralizadas por falta de gas
elEconomista.es, Bloomberg
La crisis energética provocada por el temporal de nieve y frío polar que paralizó este pasado lunes las redes eléctricas en todo Estados Unidos no da señales de calmarse. El martes por la mañana, los apagones dejaron a casi 5 millones de clientes estadounidenses y otros 5 millones de mexicanos sin electricidad en medio de temperaturas gélidas sin precedentes.
Para evitar el colapso de sus redes, los proveedores eléctricos del país han tenido que realizar cortes intermitentes de energía por segundo día consecutivo para limitar la demanda. Es probable que la grave escasez de electricidad continúe durante todo el martes, y los pronósticos indican que las temperaturas bajo cero se mantendrán al menos hasta el miércoles.
Las autoridades han informado de la muerte de dos personas, probablemente por frío, según Associated Press. Los centros médicos están intentado administrar todas las vacunas de las que disponen antes de que se dañen. Los vuelos están suspendidos. Las empresas petroleras del Golfo de México han detenido la producción de más de un millón de barriles diarios de crudo y 283 millones de metros cúbicos de gas, y las refinerías han detenido la producción de gasolina y diésel.
Falta de gas
La escasez de combustible empeora la situación. El gas disponible se está priorizando para las calefacciones de los hogares, lo que deja a las centrales térmicas, que usan ese combustible para producir electricidad, sin materia prima. En total, 26 gigavatios de energía térmica están desconectados de la red, casi el 90% de los 30 gigavatios fuera de servicio en estos momentos, lo que contrarresta el hecho de que la energía renovable esté produciendo ligeramente por encima de lo estimado por Ercot, la empresa eléctrica de Texas. En total la demanda ayer por la noche superaba la que Ercot se había planteado como máximo de cara a 2027.
Southwest Power Pool, que controla una red que abarca 14 estados desde Dakota del Norte hasta Oklahoma, ordenó interrupciones rotatorias por segundo día consecutivo. El presidente, Joe Biden, aprobó declarar el estado de emergencia para Texas, liberando millones de dólares para ayudar al estado.
Esta ola de frío es el caso más reciente de una cadena de fenómenos meteorológicos extremos que han provocado la caída de las redes eléctricas y han trastornado los mercados energéticos a nivel mundial, desde Japón hasta Europa, en los últimos meses. Todos han hecho énfasis en lo vulnerable que se ha vuelto el mundo frente a un clima cada vez menos predecible a consecuencia del cambio climático. La situación ha provocado que se planteen algunas preguntas sobre el impulso global para electrificarlo todo, desde el transporte hasta la calefacción.
Casi 4 millones de hogares y empresas quedaron sin electricidad en todo Texas el martes, según los datos de cortes de servicios públicos recopilados por Poweroutage.us. Lo mismo ocurrió con otros 400.000 en estados desde Luisiana hasta Ohio. Casi 250.000 se quedaron sin electricidad en Oregón. En México, más de 4,7 millones de hogares y empresas se vieron afectados el lunes por apagones después de que la escasez de energía en Texas desencadenara apagones en cascada. Pero cerca del 65% de los afectados en México ya habían recuperado su energía para el mediodía, según el operador de la red, Cenace.
Si bien se espera que las temperaturas suban en los próximos días, el clima en el centro de EEUU seguirá siendo extremadamente frío esta semana. Dallas, donde el lunes por la noche se registró una mínima de -17 grados centígrados, alcanzará el miércoles un máximo de -1, dijo el Servicio Meteorológico Nacional. Sin embargo, las temperaturas descenderán de nuevo a partir del jueves.
El frente frío de esta semana sorprendió al mercado de energía altamente descentralizado de Texas, que está desconectado del resto del país para evitar los trámites burocráticos que exige el Gobierno central. La red de la región está diseñada para veranos calurosos, no inviernos helados, pero muchos hogares dependen de la electricidad para calentar sus hogares. Las empresas de servicios públicos no habían tenido que realizar apagones desde 2011.
Algunas de las refinerías de petróleo más grandes se han cerrado por completo, amenazando los suministros de gasolina y diésel en todo el país
Además del impacto en los hogares, el frío está causando estragos en la propia industria energética. La producción de petróleo en EEUU ha disminuido en más de un millón de barriles por día, lo que ha ayudado a que los precios del crudo Texas se negocien por encima de 60 dólares por barril por primera vez en más de un año. El complejo de refinado de la región, que produce casi la mitad del combustible del país, está luchando por sobrevivir sin suministros de electricidad y gas. Algunas de las refinerías de petróleo más grandes se han cerrado por completo, amenazando con reducir los suministros de gasolina y diésel en todo el país.
La producción de gas natural también se ha reducido justo cuando el frío hace que la demanda aumente. En el centro Waha en Texas, el gas se cotizó el lunes a 500 dólares por millón de unidades térmicas británicas, más de 100 veces el precio en Henry Hub, el punto de referencia para el resto del país.