Internacional

Bruselas insiste en que Reino Unido debe proponer la alternativa al plan que rechaza para evitar el Brexit caótico

  • El encuentro entre Juncker y Johnson concluye sin avances

Jorge Valero
Bruselas,

La solución para evitar una salida caótica del Reino Unido de la Unión Europea sigue sin llegar. El daño inevitable para ciudadanos y empresas va camino de agravarse por la incapacidad de ambos lados de llegar a un acuerdo. El esperado encuentro entre el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, y el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, este lunes en Luxemburgo durante el almuerzo terminó con pocos avances.

Las expectativas habían crecido durante los últimos días, dadas las señales de cierta apertura que llegaban desde la isla, o más bien de consideración de diferentes alternativas para lograr el acuerdo.

Sin embargo, Reino Unido continúa sin proponer opciones al tratado de salida que rechazan Johnson y los más entusiastas con el Brexit. Por lo tanto, las posibilidades de un divorcio a las bravas el 31 de octubre continúan aumentando.

Juncker le dijo al británico que continúan "dispuestos y abiertos" a examinar las propuestas que realicen, sobre todo en relación con el llamado backstop, la salvaguarda para Irlanda del Norte rechazada tres veces por el parlamento británico, indicó la Comisión en un comunicado.

El principal obstáculo continúa siendo la manera de evitar una frontera en Irlanda, que pueda desestabilizar la paz entre unionistas y católicos. Johnson rechaza esta salvaguarda incluida en el acuerdo de salida, porque atraparía al Reino Unido dentro de la unión aduanera. Y está dispuesto a pagar el precio de una salida de la UE sin las medidas acordadas con el bloque para minimizar el daño económico y el impacto para los ciudadanos de ambos lados.

Juncker recuerda a Johnson que es su responsabilidad presentar una solución "operativa"

Este backstop se aplicaría hasta que Londres y Bruselas cerraran la nueva relación futura, en la que se debería encontrar una fórmula para evitar la frontera norirlandesa, aunque la negociación puede durar años.

Juncker le recordó a Johnson que es su responsabilidad presentar una solución "operativa" que sea compatible con el acuerdo de salida para el "backstop", según la Comisión. A pesar de la falta de avances, un portavoz de Downing Street describió la cita como un "encuentro constructivo", según AFP.

El negociador jefe de la UE para el Brexit, Michel Barnier, también acudió al encuentro, celebrado en un céntrico restaurante en Luxemburgo, país del que fue primer ministro Juncker durante 18 años, y donde Johnson fue recibido con algunos abucheos.

Dada la cercanía del Brexit, ambos lados mantendrán discusiones técnicas casi todos los días, en vez del par de encuentros semanales que hasta ahora apenas ha logrado resultados, dada la falta de propuestas del lado británico y la firmeza del campo europeo.

A pesar de ello, el Gobierno británico no pierde el optimismo. El responsable para el Brexit, Stephen Barclay, observa un consenso emergente que pueda excluir el backstop del acuerdo de salida, algo que resulta tabú para los europeos, quienes no quieren reabrir el acuerdo de salida para eliminarlo.

Así volvió a subrayarlo este fin de semana Juncker en una entrevista, como también lo hará el Parlamento Europeo con una resolución que votará esta semana.

Juncker dijo a una radio alemana que todavía tenía esperanza de que pudiéramos lograr un acuerdo con soluciones alternativas para el backstop. "Pero nos estamos quedando sin tiempo", añadió.

Desde la Comisión advierten de que la cumbre del 17 y 18 de octubre será un "hito importante". Aunque Europa está acostumbrada a salvar las situaciones más críticas en el tiempo de descuento, esa cumbre probablemente servirá para marcar si todavía queda viva alguna esperanza de lograr un acuerdo a dos semanas del Brexit, o Europa se debe preparar para la primera salida de uno de sus miembros a las malas.