Iker Jiménez ha pedido perdón por las polémicas en las que se ha visto envuelto por la cobertura informativa que en los últimos días ha hecho sobre la DANA, especialmente desde el domingo, cuando emitió un especial de Horizonte en Cuatro. Todo comenzó cuando se hizo viral un vídeo en el que aparecía elreportero Rubén Gisbert embarrándose las piernas a propósito antes de un directo para el programa.
"Me tuvieron que agarrar porque quería matar a Rubén", ha dicho Iker Jiménez. "Estaba haciendo un gran trabajo y sé que no hay maldad, pero fue un vídeo impropio. Yo soy responsable de todo lo que ocurre aquí y asumo todo lo que pasó", ha añadido sobre este colaborador que no forma parte de su equipo pero que entró en directo a modo de reportero porque se encontraba en la zona.
"Rubén es de Catarroja, ha perdido amigos y estaba en un caos psíquico como mucha gente. No me lo podía creer. ¿Qué cojones hace uno de mi equipo manchándose los pantalones?, me pregunté. Mi equipo de verdad sabe que si hacen eso, los mato. Porque yo he tenido a rajatabla no mentir ni maquillar las cosas", ha insistido.
Iker Jiménez ha explicado que en realidad Rubén lo había hecho queriendo mantener la continuidad en la narrativa de las imágenes -lo que se conoce como raccord- pero asume que es "imperdonable": "Le quería matar con mis propias manos, ya no, porque sé en qué presión estaba", ha dicho. En cualquier caso, "pido disculpas personalmente como responsable de este equipo por una situación que es muy engorrosa". "No puedo fulminar a nadie porque no es de mi equipo pero sí le puedo felicitar por el trabajo bien hecho".
Por otra parte, Iker Jiménez ha hecho autocrítica por implicarse personalmente en la tragedia. "Me creí Robin Hood y no lo soy. Y me creí un periodista excepcional e igual no lo soy", ha explicado. Y aquí es cuando comienza el otro "error" que ha asumido Iker Jiménez y que tiene que ver con el bulo de los muertos que supuestamente iban a ser encontrados en el parking de Bonaire.
Iker Jiménez ha explicado que le fallaron las fuentes y que lanzó un tuit personal donde aseguraba que en ese aparcamiento había muchas víctimas. "Lo escribí en casa encorajinado hasta los cojones y pensando que nos estaban engañando. Pero nunca me he alegrado tanto de fallar en algo. ¿Ustedes se creen que yo quiero un muerto? El error es ese tuit", ha dicho. "Iker jamás ha dicho que ahí hubiera un cementerio con 700 víctimas. Solo puse un tuit indignado".
"Pido disculpas a toda esa gente que igual estaba en el parking y no había podido hablar con sus familiares. He aprendido la lección, intentaré ser más escrupuloso, desconfiaré de todas las fuentes y que la información que demos sea absolutamente certera porque sé que tenemos muchos ojos encima", ha manifestado el presentador, que ha recordado que el especial del domingo se preparó en "hora y media".
"De esto aprendo, porque de esto aprendo, les aseguro. Me he creído demasiado, un explorador de otro mundo. Pequé de indignado, repartiendo palos a diestro y siniestro y no puede ser", ha continuado el presentador, que también ha mandado una indirecta al Gran Wyoming, aunque no ha dicho su nombre, quien hace unos días se dirigía a él desde La Sexta. "Me parece muy bien que personas importantes hablen de mí, pero no puedo criticarles porque, como leen, no sé si lo dice ellos o el guionista".
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