Amor Romeira estalla contra los militares trans y las televisiones que les dan voz: "¡Basta ya!"

El polémico paso de 'militares transexuales', que se han apoyado en la ley trans de Irene Montero para cambiar de género, por los platós de televisión ha reabierto un gran debate. Este jueves, de hecho, se vivió un momento de gran tesión con un exmilitar y ex gurdia civil en el programa de Sonsoles Ónega, hasta el punto de que la presentadora ordenó: "¡Que le corten el micrófono!": "¿Sabe lo que le digo? Que en este programa hemos traído gente han venido todos, los que dicen que se sienten de una forma y de otra, no me he arrepentido de haber traído a nadie. A usted, sí", sentenció la comunicadora de Antena 3.

En redes se ha criticado el hecho de que se le facilite un altavoz mediático a ciertas personas, independientemente de como después se resuelvan ciertas situaciones en los platós de televisión: "Basta ya, los medios de comunicación tienen la obligación de no traer a gentuza", espetó Valeria Vegas, periodista, escritora y mujer trans, desde el plató de Y ahora Sonsoles donde colabora.

Amor Romeira, por su parte, ha cuestionado a ciertos programas y ha lanzado un alegato trans en sus redes sociales. "Os voy a mostrar cómo se han orquestado los testimonios de los militares trans. Acompañádme en esta triste historia de fraude de ley", ha explicado.

A continuación, la ex gran hermana, que hizo historia al convertirse en la primera mujer trans del concurso, ha compartido un vídeo con el filtro de un bigote para imitar y dejar en evidencia a las personas que según ella cometen este fraude y denigran al colectivo trans y sus derechos: "A ver, bro, cómo les explico. Me he dejado el bigote para ver si me llaman de los platós de televisión porque yo soy mujer. Yo desde que vi que salió esta ley dije: 'Bro, soy mujer, y ahora estoy esperando que me llamen Sonsoles, Ana Rosa, la Griso y todo el mundo para hacerme la tourné porque mi apariencia ya con este bigotito me hace más mujer'", ironiza.

Y prosigue, metida en su papel: "Porque ahora ser mujer es llamarte Doña Roberto, Doña Francisco, Doña Juan. Perdón, yo misma, yo mismo. ¿Cómo me tenía que referir a mí para el fraude de ley? ¿Cómo se borra esto?". El enfado de Romeira con ciertos programas de televisión es evidente: "Yo estoy yendo ya para Sonsoles, bro. La que nos está sacando a todos", dice también. "Y luego hacemos doblete, nos vamos para Ana Rosa", añade.

Después, Amor aparca su actuación para dejar claro el mensaje de su sketch a sus miles de seguidores: "Espero haber captado tu atención con estos sketches donde mezclo el sarcasmo con la ironía y la más cruda realidad. Me imagino a estos trogloditas, a estos 'señoros', llamándose los unos a los otros avisándose de que la ley trans te puede ayudar a solventar problemas jurídicos que tienen con tus mujeres por violencias de género, custodias compartidas, custodias completas...".

Y sentencia, según su punto de vista: "Es una vergüenza que jueces no vean el fraude de ley. Las mujeres trans no somos Roberto, Juanjo, Francisco, José, Paco, no lo somos. El punto número 1 donde se identifica un fraude de ley es que la persona trans no quiera cambiar su nombre en femenino. O sea, ¿hola? Es de las primeras luchas de las mujeres trans".