José Pablo López (Sayalonga, Málaga, 15 de mayo de 1977) es sin ninguna duda la verdadera estrella de RTVE. El director general de Contenidos de la Corporación no fue capaz este miércoles de cambiar su programación, coo sí hicieron Antena 3 y Telecinco, para ofrecer en directo la última hora del trágico incendio de Valencia. La televisión pública mantuvo el concurso El Cazador, mientras que las privadas cubrían el dramático suceso con sus primeros espadas. El mundo al revés. Paradójicamente, si algo caracteriza la insólita gestión de José Pablo López es que batalla desde La 1 como si fuera una cadena privada, peleando por la audiencia como si viviera de la publicidad, con arriesgadas y pintorescas decisiones, y contenidos impropios de una televisión pública, pero no lo hace con el dinero de accionistas privados. Por eso, José Pablo López puede permitirse el lujo de gastar millonadas o emitir en una noche una miniserie entera que cuesta una fortuna.
José Pablo López es la estrella de TVE y su currículo nos recuerda su paso por La Sexta de José Miguel Contreras y Jaume Roures, la de sus primeros años de vida, o su puesto de director general de 13TV, propiedad de la Conferencia Episcopal, y sobre todo sus cuatro años y medio como director general de Telemadrid, cuando Isabel Díaz Ayuso gobernaba la CAM gracias a los votos de Ciudadanos. Este periodista y abogado lleva 22 meses al frente de los contenidos de TVE y RNE, y en este periodo se ha convertido en el protagonista de la sociedad mercantil estatal que gestiona el servicio público de la radio y televisión de España como si fuera su propia empresa, si dar apenas explicaciones y sobre todo sin que parezca importarle el dineral que los contribuyentes tiramos a la basura a cambio de contenidos que no aportan nada a una cadena pública y que nos dan otras televisones (privadas), como ver a Terelu Campos y Lydia Lozano cotilleando de famoseo, a Rocío Carrasco cocinando bollos o a Jordi González, el nuevo Peter Sellers de la crónica social, preguntándose si Kate Middleton está de baja porque "se está poniendo las tetas". D Corazón ha sido uno de los grandes fracasos de José Pablo pero no el único. La 1 terminará este mes de febrero en tercer lugar, por detrás de Antena 3 y Telecinco, a pesar de sus tejemanejes con la parrilla. Y es que los desastres se suceden.
El mejor de la historia de Silvia Intxaurrondo
El mejor de la historia, una de las últimas propuestas de José Pablo López, será prsumiblemente recolocado o retirado (se habían contratado seis episodios) de la programación ante su estrepitoso fracaso de audiencia. Este viernes, la segunda entrega del espacio presentado por Silvia Intxaurrondo marcó un bochornoso 5.1% de cuota de pantalla, y eso a pesar del impulso del fútbol femenino España-Países Bajos (12.1%) y de que la competencia se lo puso fácil: El Desafío marcó mínimo (liderando) en Antena 3 (12.9%) y De Viernes (9.4%) sufrió una fuerte caída en Telecinco. El mejor de la historia fue cuarta opción de prime time incluso por detrás de Cuatro y La Sexta. El programa está producido por The Pool Managment, la empresa del documental de Pedro Sánchez, ligada a Andrés Valera Entrecanales, accionista y consejero del Grupo Prisa. The Pool Managment es la productora que se encargó de estrenar en TVE el programa Vamos a llevarnos bien, retirado tras el estreno al obtener sólo un 4,8% de share. Costó 4,2 millones de euros y lo presentó Ana Morgade.
El formato importado de la BBC se une a la larga lista de fracasos de José Pablo López como El Conquistador, Dúos increíbles o La plaza, entre otros, cuya naturaleza, coste y audiencia comprometen al director de Contenidos Generales. El ejecutivo muestra escasa pericia para conectar con la audiencia, lo mismo que le ocurrió en los tiempos en los que dirigió Trece y Telemadrid. Ahora está logrando una bajísima eficacia con algunos de los formatos de La 1.
Otro de los grandes patinazos de José Pablo López fue Dúos increíbles, que tras una irregular primera temporada estrenó la segunda. El talent tuvo un coste de más de 6 millones de euros y una audiencia media del 7,8% de share.
Más decepcionante resultó El Conquistador del Caribe, que venía avalado por sus éxitos en Euskadi y Navarra y aterrizó con mal pie en la pública estatal con 766.000 espectadores de media y una audiencia del 8,7%. Apenas un 7,4% marcó la final de este reality aventurero que tuvo un coste para TVE de 5,65 millones de euros, lo cual prácticamente triplica el precio que pagaba la televisión pública vasca ETB por un formato similar.
Mayor vergüenza causó el lanzamiento de Brigada Tech, que fue levantado del prime time tras una entrega en la que Luján Argüelles y colaboradores como Ricky García lograron 372.000 espectadores y un 2,8% de share.
Los trece programas de este espacio promediaron un 1,2% de share y 149.000 espectadores. El programa forma parte de las acciones que forman parte del Pacto por la Generación D y se financió con 4 millones de euros de los Fondos Next Generation de la Unión Europea. La presentadora se explicó: "Está financiado por fondos europeos destinados exactamente a la divulgación. La digitalización es un tema que asusta y bloquea. Hay que seguir divulgando y capacitando a la sociedad con paciencia". Y aseguró que no era "casposo" ni "deficiente".
José Pablo López tampoco se mostró acertado al estrenar la serie La ley del mar en una sola noche a pesar de tener un coste de más de 3 millones de euros y por alumbrar el magazine La Plaza de La 1, que con Jordi González al frente contó con 8 entregas que naufragaron con el 6,6% de share y 456.000 seguidores. González también es coprotagonista de otra discutible decisión del director de Contenidos generales de RTVE, que desoyó a Anne Igartiburu y reseteó Corazón para convertirlo en DCorazón, que está fracasando en los mediodías del fin de semana con audiencias que a veces no llegan al 6%, siendo triplicado por La Ruleta de Antena 3 o duplicado por el Socialité de Telecinco.
250 Millones a la basura
Los sindicatos ya pusieron el grito en el cielo por la injustificable gestión de López. "Desde que ha llegado José Pablo López a la dirección de Contenidos, más de 250.000.000 de euros se han destinado a producciones externas fallidas que no cumplen los objetivos establecidos en los contratos, pero que se siguen pagando sin sanciones", dijo un portavoz de USO.
Comisiones Obreras, por su parte, denunció que "nunca, como viene sucediendo ahora, TVE ha fracasado con tanta reiteración en la apuesta por los programas con mayor coste de la parrilla". Y mostró su pesar porque "docenas de millones de euros se destinan a programas fallidos, a programas sin audiencia y sin contenidos de relevancia social. La mayoría de estos programas son programas de productoras privadas, productoras que imponen los temas, productoras que imponen los invitados".
José Pablo López no fue capaz de levantar la audiencia de Telemadrid bajo su mandato y puso en marcha proyectos fallidos como Hazlo por mil, Lo sabe, no lo sabe, En boca de todos, La víctima número 8, Turno de palabra, La solución, La báscula, Aquellos maravillosos años o Sexo y etcétera.
Anteriormente, el malagueño dirigió Trece (que se encalló en el 2% de share a pesar de la OPA que le lanzaron para alegría de La Moncloa con Mariano Rajoy como huésped a Intereconomía TV, hoy El Toro TV). López ha fracasado al frente de la tele más cercana al Gobierno de Mariano Rajoy (Trece), a Ciudadanos (Telemadrid) y al PSOE (la actual RTVE).
Le vemos más preocupado por "regalar" dinero a productoras a cambio, muchas veces, de programas que la audiencia rechaza, y por ganarse el título de candidato para sustituir a Manuel Villanueva en Mediaset si convence a Alessandro Salem (y a Ana Rosa Quintana) de que con él les irá bien. Mientras, pelea por sacar algo de productividad al "funcionariado" de la Corporación, templa sus distensiones internas con la directora de Comunicación de RTVE, o con Elena Sánchez (la presidenta interina no le dejó fichar a Belén Esteban), trata de cumplir con la cuotas de determinadas productoras externas (mantener alimentados a José Miguel Contreras, Andrés Varela Entrecanales y demás proveedores de fracasos) y sueña con que le dejen meter a los creadores del desaparecido Sálvame en TVE para que, además del Late Xou de Marc Giró en La 2, le hagan un magacín de tarde en La 1 que compita con las privadas.