A Jordi González (Barcelona, 1961) le contrataron para liderar un proyecto muy ambicioso en la cadena pública: presentar La plaza, el magacín con el que José Pablo López, director de Contenidos de RTVE, pretendía competir de tú a tú desde La 1 contra Sonsoles Ónega y Ana Rosa Quintana.
Fue prácticamente un suicidio y, a las dos semanas, la pública le dijo a Jordi González que lo retiraba de la parrilla después de fracasar de forma estrepitosa. Durante este mes y medio, el catalán ha estado haciendo pasillos (y cobrando un sueldo colosal) pero parece que ya tiene nueva y sorprendente ubicación.
Según ha podido saber Informalia, después de las Navidades Jordi presentará Corazón, el legendario espacio de crónica social, con Anne Igartiburu todos los fines de semana. De esta manera, la pública refuerza este espacio que lleva más de veinte años en la parrilla y, de paso, le da actividad a Jordi, que llegó con un súper contrato, demasiado bien pagado como para estar llevándoselo sin levantarse de la cama. Las primeras pruebas ya han arrancado en Prado del Rey, porque las grabaciones regresan a la sede madrileña de la cadena. Desde hace unos meses, Corazón se grababa los fines de semana en Barcelona.
"No hay demasiada química entre el Jordi y Anne"
"No hay demasiada química entre el Jordi y Anne", nos cuentan cuando preguntamos qué tal se llevan el catalán y la vasca. "Pero los mandamases confían en que poco a poco la profesionalidad y veteranía de ambos se imponga y el engranaje sea perfecto", explican a Informalia desde El Pirulí.
Anne se derrumbó cuando le dijeron que, después de más de un cuarto de siglo (con alguna breve interrupción) ya no sería la "diosa" en solitario que daría la cara amable de el corazón los fines de semana y que no la veremos solo a ella cuando suene la sintonía de Nancy Sinatra y su These Boots Are Made for Walkin, si es que la mantienen.
Anne Igartiburu es a sus 54 años una de las pocas caras reconocibles de TVE, que ya no cuenta entre sus estrellas con Ana Obregón, despreciada y descartada para las campanadas y Telepasión tras su año más mediático y polémico, azote de Pedro Sánchez y demasiado significada con la gestación subrogada y el negocio de las exclusivas con su hija-nieta.
Pero Anne no vive a sus 54 espléndidos años los mejores momentos de su historia de amor con TVE. La de Elorrio (Vizcaya) decidió empezar nuevos proyectos en otras cadenas de la competencia, como Antena 3, y también para Telemadrid, algo que no sentó nada bien en la pública. De ahí que el año pasado la castigaran sin postre y no presentara las campanadas, después de quince años haciéndolo de manera consecutiva.
Fue Ana Obregón, acompañada de Los Morancos, la que lo hizo. Éste, sin embargo, una vez descartada la bióloga, están en el aire los nombres de los elegidos para acompañar el finas del año desde la Puerta del Sol a las legiones de españoles que se mantienen fieles a TVE y no quieren ni oír hablar de Cristina Pedroche, por muy poca ropa que lleve. Se habló de que sería Isabel Pantoja la que despediría el año en TVE ya que la cadena estaba negociando con ella, pero, de momento, no hay nada confirmado. Al contrario, hay quien afirma que nunca la llamaron para darle semejante trabajo.
Jordi, por su parte, llevaba años vinculado a Mediaset, donde ha presentado formatos de todo tipo, pero el último año se quedó sin programa y sin contrato de cadena. Por eso, tras unos meses, viviendo fuera de España, decidió aceptar la oferta de Televisión Española.
Pocas cosas se saben de los cambios que se aplicarán a este clásico de TVE que se ocupa desde hace décadas de la crónica social sin las estridencias de otros formatos de las cadenas privadas como el Socialité de María Patiño (que acaba contrato este mes con La Fábrica de la Tele). Seguirá en el mismo horario los fines de semana, aunque nos dicen que "quizás lo amplíen un poco". También estudian incluir algunos colaboradores expertos y curtidos en el mundo de corazón. Todavía quedan unos meses para lograr el equipo perfecto porque planean estrenarlo pasadas las Navidades.
