La entrevista de Jordi Évole al presidente del Gobierno que este domingo emitió La Sexta tuvo un precedente: la que Sánchez protagonizó hace siete años, también con Évole y también en La Sexta. Era octubre de 2016 y el momento que vivía el político era, como ahora, muy particular. Le acababan de apartar de la dirección del PSOE y luchaba por sobrevivir políticamente. Ahora, se enfrenta a sus elecciones más difíciles, tras el batacazo del 28M, con todas las encuestas en contra.
"Aquella vez le salió bien. ¿Lo volverá a hacer?", planteó el presentador hace unos días cuando promocionaba su nuevo encuentro comparándolo con el anterior. Este domingo, Évole siguió haciendo referencias a esa entrevista de 2016 durante varios instantes de la charla, recordando vídeos y opiniones que Sánchez tenía entonces. Además, ambos programas se grabaron sentados en la mesa de un bar de Madrid. La de anoche fue en Casa Labra, el establecimiento donde se fundó el PSOE.
Lo de Évole registró este domingo un 12% de cuota y 1.475.000 espectadores, un notable resultado para el programa de La Sexta que dobló la media de esta cadena en el día (5,7%). Fue la segunda opción y se quedó cerca de Supervivientes, que lideró esa franja con un 12,7%. La entrevista de Sánchez fue el segundo mejor resultado de Lo de Évole en esta temporada, pero se quedó por debajo del resultado que consiguió Macarena Olona (segunda parte), emitido el 19 de febrero, cuando registró un 12,6% y 1.757.000 seguidores.
Sánchez contra Sánchez: 8 puntos y 2 millones menos que en 2016
Aunque el resultado de este domingo fue muy destacado, es importante comparar esta entrevista con la que dio en 2016, puesto que se supone que las dos apariciones se producían en un momento clave para Sánchez. En aquella ocasión, Salvados, que era el programa que presentaba Jordi Évole, se disparó hasta el 20,1% y reunió 3.609.000 espectadores.
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Es cierto que aquella comparecencia se produjo en otoño, en plena temporada alta televisiva, con un consumo mayor, pero la diferencia entre una y otra, tanto en share (no afecta el consumo) como en espectadores, es llamativamente menor. Comparado consigo mismo, en un formato casi idéntico, en la misma cadena y con el mismo presentador, Sánchez pierde 8,1 puntos de cuota de audiencia y 2.134.000 espectadores.
El presidente del Gobierno, que hace unos días acudió a El Intermedio, tiene previsto visitar este martes El Hormiguero y también quiere pasarse por El programa de Ana Rosa. Estos dos últimos programas han sido muy críticos con su gestión de los últimos años.
