Beatriz Cortázar (Madrid, 9 de julio de 1963) es una de las periodistas de referencia en la crónica social. Profesional de dilatada carrera, trabaja y ha trabajado en numerosos medios, como Abc o en la tertulia rosa de Federico Jiménez Losantos, además de numerosos programas de televisión. Pero para la mayoría de los espectadores es una de las contertulias habituales de El programa de Ana Rosa, donde acude varios días a la semana desde hace 16 años. Ahora, la madrileña da un volantazo a su carrera y se cambia a Antena 3, donde podremos verla en distintos espacios, como Espejo Público, rival directo de Ana Rosa, o, por qué no, en el magacín vespertino de Sonsoles Ónega, que vela armas para la batalla que llega después de la desaparición de Sálvame y ante la nueva etapa que se avecina.
La salida de Beatriz Cortázar es la punta de lanza de una batalla que se libra por los colaboradores. No hay tregua, ni banderas blancas. La guerra ya ha empezado y no solo por saber quién liderará las mañanas o las nuevas tardes de Telecinco y Antena 3 a partir de septiembre, sino por sus respectivos equipos.
También Quintana ha tentado a algún presentador de Planeta. Tiene que poner toda la carne en el asador porque la apuesta de sustituir a Sálvame es muy arriesgado para ella.
Las cadenas están intentando reclutar a los mejores colaboradores que hay actualmente en la televisión para intentar rascar una décima de share que podría ser muy significativa. Quintana cuenta desde hace años en Unicorn con primeras espadas como Antonio Rossi, Marisa Martín Blázquez o su mano derecha, Miguel Ángel Nicolás. Pero Informalia tiene constancia que Atresmedia está recibiendo ofrecimientos de habituales de Telecinco ante la incertidumbre de una nueva etapa y algunos se van. Beatriz Cortázar ya ha firmado con Antena 3 pero hay otros que están negociando.
Pero esta guerra por los colaboradores no acaba aquí. Hasta ahora a las cadenas no les ha importado compartir personal, pero eso va a cambiar. Según indican a Informalia personas del sector, "Antena 3 no va a permitir que si un periodista colabora con ellos pueda hacerlo también en un programa de Telecinco. Tendrán que elegir", nos aseguran. "Y en Mediaset también se lo han planteado, aunque en el fondo, con que una de las dos lo ponga en práctica ya no podrán colaborar en ambas cadenas", nos aclaran.
Hasta ahora bastaba con no coincidir en la misma franja horaria, y por eso podíamos ver a un mismo colaborador en un programa de Antena 3 por la mañana y en otro de Telecinco por la tarde, algo que, en el fondo, llamaba la atención de los espectadores. Pero esto ha cambiado y la guerra por las audiencias se va a recrudecer y no van a conceder ningún beneficio al rival. Es decir, que los tertulianos tendrán que elegir entre trabajar por la tarde en TardeAR o sentarse en el saloncito de Y ahora Sonsoles. Aunque esto también se amplía al resto de programas como Espejo Público o Fiesta, entre otros.
La hija de Fernando Ónega, como ya hemos contado, siente mucho respeto por un animal de la comunicación como Ana Rosa Quintana, para quien trabajó una buena temporada. No es fácil para ella, a pesar de los buenos resultados de audiencia, enfrentarse a la que fue su jefa y amiga durante años. Ana Rosa siempre confió en Ónega como presentadora y la puso al frente de un programa en solitario. Dicen incluso que la veía como su sucesora tras su jubilación (Ana Rosa tiene 68 años, aunque luzca estupenda). Por eso, su traición marchándose a Antena 3, le rompió todos los planes y, según algunas fuentes, su amistad, si alguna vez la hubo más allá de lo profesional.