Omertá en la cadena italiana. El hombre de Berlusconi en España impone la ley del silencio. Se ha montado tal escándalo en la cotizada italiana que no hay otro remedio. El encontronazo entre Marta Riesco y Cristina Porta la semana pasada en pleno directo, durante la emisión de Sálvame, ha puesto patas arriba la cadena. Tanto es así que una de las víctimas colaterales, el aludido Borja Prado, presidente de la cotizada, ha tomado su segunda decisión al respecto.
La primera fue pedir explicaciones a la productora para la que Riesco trabaja y que la ataran en corto, lo que ha supuesto que la hayan castigado sin salir en pantalla. Ahora, el presidente de Mediaset ha decidido que nadie hable del tema en ningún programa de la cadena. "Como si nada hubiera pasado", ha dicho.
Lo sucedido del programa fue inmediatamente censurado de la versión del programa que Telecinco deja colgado en Mitele, el canal de Internet de Mediaset donde se puede ver cualquier cosa que haya emitido sus canales convencionales, aunque las redes sociales no perdonan y es fácil encontrar lo sucedido. Después ha llegado las intervenciones de la propia Marta Riesco en sus cuentas: desde grabarse en pleno estado de ansiedad, hasta protestar por haber sido ella la víctima de los represores de Mediaset, lo que considera una injusticia. Por cierto, que la novia de Antonio David volvió a aludir a Borja Prado.
"A ver qué opina de esto Borja Prado porque esto es acoso"
El presidente de Mediaset es víctima de un escándalo de imagen sin precedentes. La semana pasada su nombre se hizo viral: Borja Prado ha aparecido mezclado con los guiñoles más freaks de su propia telebasura. No quiere más escándalos ni comentarios haciendo alusión a él ni a ningún otro miembro ejecutivo que exponga a la cadena a más críticas. Marta se despachó a gusto durante el directo en Las Ventas: "A ver qué opina de esto Borja Prado porque esto es acoso", dijo. Y al día siguiente, tras saber que había sido apartada de sus labores de reportera y durante un ataque de ansiedad soltó: "Estamos enseñando a nuestros pequeños y adolescentes a no rendirse contra el bullying. A denunciar a los abusadores, a decírselo a sus familiares. A los directores. A no silenciarse. Y ahora es justo lo que yo hago. Denunciarlo públicamente y pedir al presidente de mi trabajo que haga algo mientras me increpan y lo que se me hace al día siguiente es apartarme de mis funciones, no a los abusadores. Ese es el ejemplo real de lo que ocurre cuando intentamos que se haga justicia".
Baja médica por ansiedad
Marta tiene la baja médica por ansiedad después de este capítulo, pero hace ya mucho tiempo que se hizo incómoda para la cadena de Fuencarral. Tras confesar que salía con Antonio David y enfrentarse públicamente a Sálvame, dejó de trabajar en Ana Rosa como reportera para pasar a nuevos proyectos apartados de cualquier directo. "Se jugó su puesto con todo lo que hizo y dijo pero al final la dejaron en las oficinas de la productora hasta que pasara un tiempo y se calmaran los ánimos", nos dice una persona que conoce de primera mano la situación.
Una vez que empezó Fiesta decidieron darle una segunda oportunidad, que ciertamente ha aprovechado porque como periodista trabaja bien, pero en el momento menos adecuado ha saltado la chispa y ha vuelto a poner a la cadena y la productora en una situación más que delicada. De hecho, en otros casos similares y menos mediáticos, algunos colaboradores han dejado de trabajar por menos. Solo hay que recordar a Rosa Benito y su primera salida de Sálvame tras la demanda de su yerno para darse cuenta.
Dimensión pública del despido de Marta Riesco
En el caso de Marta, la situación es más delicada. Ella tiene vinculación con Unicorn, la productora de Ana Rosa Quintana, desde hace más de siete años, y la dimensión pública de su despido sería un escándalo. Pero el caso sería similar y se ha planteado. Su novio, tiene demandada a Mediaset y ha ganado en primera instancia. Además, el ex de Rociito no deja de hacer comentarios contra la cadena y sus responsables, por no hablar de los ataques contra Jorge Javier Vázquez. Sin ir más lejos, hace unos días, cuando intentó defenderla de los ataques. "Lo que llevas sufriendo durante los últimos meses es inaceptable e incomprensible por parte de un medio de comunicación que abandera causas según les interesa en los negocios. Son la fábrica de la manipulación. Imponen el pensamiento único. Son especialistas en distorsionar la realidad y en incitar a su público al odio, al acoso y a destrozar las vidas de las personas, engañándolos a todos vilmente cuando son los que más tienen que ocultar. Son el ejemplo de una organización criminal nunca antes vista en televisión, por lo que van a tener que responder ante la justicia. Ostentan el récord en sanciones de CNMC y demandas en los juzgados por personajes famosos dónde vulneran todos sus derechos. Y ahora una más, el acoso laboral y el abuso de poder". Y después le ofrecía todo su apoyo a su novia. "Marta, quiero verte pronto recuperada. Quiero que vuelvas a ser la persona fuerte y luchadora que eres. Ahora más que nunca. Que vuelvas a darnos lo mejor de ti. Que nos hagas reír. Que nos des amor. Porque sabes que tienes mucha gente que cuida de ti y que te quiere. Valiente es quien dice la verdad aún sabiendo que puede perder su calma".
Una vez más, están situando a Borja Prado en una situación más que complicada porque, si bien parece que se ha hecho una campaña de acoso y derribo contra Marta y Antonio David con duros ataques, también es comprensible que se pueda pensar que no se puede interrumpir un programa en directo y gritar el nombre del presidente de la compañía diciendo que eso es acoso. Así las cosas, Prado lo tiene claro: evitar que eso vuelva a suceder y silencio administrativo.