El juicio del 'caso Carlota Prado' por los presuntos abusos sexuales en la casa de Gran Hermano ha arrancado este jueves, justo cinco años después de los hechos que ahora se juzgan. En el banquillo se sienta José María, el concursante acusado de abusar sexualmente de Carlota, con quien mantenía una relación sentimental en la casa de Guadalix de la Sierra.
Carlota Prado llega a este juicio sin abogado. Su representante legal dejó de asistirla hace unos días y ella rechazó nombrar otro, ni siquiera quiso que se le asignara uno de oficio. Renunció, por lo tanto, a ejercer la acusación y todo ha quedado en manos de la Fiscalía.
Ante esta situación, Carlota Prado comparece en el juicio en calidad de testigo. A su llegada a los juzgados, la exconcursante de GH ha coincidido en el pasillo a pocos metros de José María, según relata Vertele. A continuación, Fiscalía y defensa han negociado un acuerdo de conformidad que finalmente no ha salido adelante. Carlota, como testigo, ha permanecido ajena, fura del lugar donde se estaba debatiendo.
Finalmente, el juico ha arrancado y se celebra a puerta cerrada, una decisión que ha tomazo la jueza después de la petición de la Fiscalía, a la que se ha adherido la defensa y también el abogado de Zeppelin, la productora de GH.
Piden dos años y medio para José María y 6.000 euros a Zeppelin
El fiscal solicita para José María López una pena de dos años y seis meses de cárcel por un supuesto abuso sexual que se produjo en la casa de GH en noviembre de 2017. Asimismo, le reclama una indemnización de 6.000 euros por los daños morales causados a la víctima, idéntica cantidad que a la productora del programa, Zeppelin, por los daños ocasionados a raíz de la exhibición a la perjudicada de las imágenes grabadas sin la ayuda de profesionales que la pudieran atender en ese momento.