Sálvame ha recuperado uno de sus temas favoritos: Isabel Pantoja y Encarna Sánchez. El programa de las tardes de Telecinco anunció el miércoles que tenía en su poder una grabación de 28 minutos de la tonadillera que tenía intención de emitir.
En esa grabación, Pantoja habla con una persona sin identificar y opina sobre la locutora de radio. Antes de que Sálvame emitiese los audios, que corresponden a 1993, Joaquín Prat hizo una reflexión en El programa de Ana Rosa sobre este asunto.
El periodista y sus colaboradores, Isa Pantoja incluida, no entendían de qué hablaba la tonadillera y tampoco quién era su interlocutor. Por lo tanto, analizaron de qué manera había llegado la grabación a Sálvame y si realmente se podía emitir. "Es el interlocutor el que graba esa conversación, entiendo", planteó Joaquín Prat. "No necesariamente", le corrigió Marisa Martín Blázquez.
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"Es una conversación de 28 minutos que alguien está grabando", dijo el presentador, mientras que en el plató sugerían que también podría ser una charla "pinchada". "Perdona, si es una conversación pinchada, no se puede emitir", advirtió el presentador. "Si el interlocutor ha autorizado su difusión, sí, pero si es una conversación pinchada, es un delito", insistió el periodista.