La aparición en el mercado del libro Famosos a la carta de Jaime Barona, centrado en los años que trabajó en el restaurante Lucio, ha causado bastante indignación en la familia propietaria del conocido local de Madrid, y de ahí que no solo preparen un comunicado desvinculándose absolutamente de esta publicación, sino que también estén estudiando medidas legales por la utilización del emblemático local.
Jaime Barona firma este libro que recoge las anécdotas que vivió durante los años que trabajó en Lucio. Aunque se presenta como el Metre de este establecimiento, del que salió hace ya 15 años, fuentes cercanas a la familia insisten en que nunca ejerció ese puesto, sino que fue un camarero. Que Barona relate escenas o historias que se cocieron entre las mesas de Lucio es algo que va totalmente en contra a la línea editorial de la familia, cuyo lema siempre ha sido la discreción y que sus clientes se sientan como en casa y con la seguridad de que están en un ambiente privado y sin correveidiles para contar lo que se cuece y mucho menos entre sus empleados.

Barona recuerda algunos de los momentos que asegura haber vivido, como las dos noches que pasó el actor George Clooney en Casa Lucio y cómo le insistió para que se fuera después a una discoteca o el momento en el que un conocido matador de toros le tocó sus genitales mientras pedía el menú de los comensales, entre los que estaba su familia. Si alguien imaginaba que este libro contaba con la bendición de Lucio y sus descendientes está totalmente equivocado. La historia de Casa Lucio se ha reflejado en multitud de artículos y también en un libro dedicado a su propietario, pero siempre haciendo gala de esa discreción y ese silencio sepulcral en cuanto a lo que se vive en esas mesas.
Los famosos, intelectuales, deportistas, periodistas, artistas y cualquier cliente que se acerque a tomar los clásicos huevos estrellados o los callos a la madrileña que tanta fama arrastran siempre han sabido que en cualquier momento podía aparecer la estrella internacional más renombrada o el político más buscado, pero también que sería pura casualidad dado que en este restaurante valen más por lo que callan que por lo que cuentan. De ahí el enorme enfado con este Famosos a la carta que no solo no aplauden, sino que quieren dejar muy claro que están en contra y muy alejados de las intenciones de su autor.