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La hija de Elon Musk que renunció a su apellido ataca a su padre: "El saludo nazi fue una locura"

Vivian Wilson, hija de Elon Musk

Existen fortunas tan grandes que terminan devorando a quienes las heredan. También existen apellidos tan pesados que no hay hombro capaz de sostenerlos sin tambalearse. Vivian Wilson, hija de Elon Musk, el hombre más rico del mundo, ha decidido que ni el dinero ni el nombre de su padre la atañen. En una entrevista para Teen Vogue, Vivian, una de los 14 hijos de Musk con cuatro mujeres diferentes, admite que no sabe cuántos hermanos tiene

A los 20 años, Vivian ha cortado todo lazo con su progenitor. Su independencia no es solo económica —que ya sería un gesto insólito tratándose del hijo de un multimillonario— sino también emocional, social y legal. Desde 2022, su acta de nacimiento la reconoce con un nuevo nombre, libre del Musk que alguna vez le ató a su padre. La última vez que le dirigió la palabra fue en 2020, cuando le comunicó su identidad transgénero. Desde entonces, silencio. Un mutismo que, al menos de su parte, parece un alivio: "Dios, gracias", sentencia en una reciente entrevista con Teen Vogue. Si la familia Musk fuera un árbol genealógico, sería más bien una jungla inextricable. Catorce hijos reconocidos, madres que se superponen, nacimientos por fecundación in vitro, revelaciones sorprendentes que estallan en las redes antes que en los círculos íntimos. En esa nebulosa de relaciones, Vivian confiesa no estar segura de cuántos hermanos tiene realmente.

Uno de los momentos más surrealistas de la entrevista es cuando revela cómo se enteró de algunos de los nuevos miembros de la familia. De los trillizos que su padre tuvo con Shivon Zilis, ejecutiva de su compañía Neuralink, se enteró al mismo tiempo que el resto del mundo. Y sobre el segundo hijo de Grimes, otra de las ex parejas de Musk, Vivian supo la noticia cuando una drag queen lo comentó en Reddit. La historia parece sacada de un guion de comedia negra: Tatianna, exparticipante del famoso concurso RuPaul's Drag Race, hizo una publicación en Twitter con la noticia del nuevo hijo de Musk y Grimes. El mensaje fue compartido en un subreddit dedicado al mundo drag, un espacio que Vivian frecuenta. Así se enteró de que tenía otro hermano.

Contra su padre, sin rodeos

La distancia que ha puesto entre ella y Musk no es solo afectiva, sino también política y moral. A diferencia de su padre, quien oscila entre el libertarianismo y la extrema derecha con la misma facilidad con la que cambia de socios empresariales, Vivian no es neutral cuando se trata de él. En la misma entrevista, se refiere con dureza al gesto que su padre hizo durante la investidura de Donald Trump, cuando alzó el brazo en un saludo que para muchos tenía un inconfundible aire fascista. Vivian no se anda con eufemismos: "Esa mierda fue un saludo nazi, llamemos a las cosas por su nombre", dice.

Musk, que se ha convertido en una figura influyente dentro de los círculos más ultraconservadores de EE.UU., no ha respondido ni a Teen Vogue ni a Vanity Fair, que intentaron recoger su versión. Pero tampoco parece haber intentado una reconciliación con su hija. Vivian, por su parte, se siente atrapada en una paradoja: sabe que es famosa por el simple hecho de haber nacido en el seno de la familia Musk, y eso le incomoda. "Quiero hacer algo que realmente justifique esta atención", confiesa. "No me importa él. Lo que me molesta es que me asocien con él."

Los intereses de una joven que quiere desaparecer del apellido Musk

Si algo ha definido a Vivian es su inclinación por los espacios que celebran la diversidad y la cultura queer. Su afición por las drag queens no es solo una forma de entretenimiento, sino una comunidad en la que parece encontrar una familia alternativa. Entre sus otras pasiones está Los Juegos del Hambre, la saga distópica de Suzanne Collins, donde una joven desafía un sistema autoritario. Su publicación en redes cuando reveló su identidad transgénero fue acompañada de una encuesta: "¿Eres más de Peeta o de Gale?" Su respuesta no deja lugar a dudas: "Peeta, sin dudarlo. Gale mató a la hermana de Katniss. Que se joda." Es difícil no ver en esta elección un trasfondo simbólico. Peeta, el personaje que elige el amor y la compasión sobre la guerra y la ambición, frente a Gale, quien se endurece hasta volverse irreconocible.

El precio de la herencia

No es fácil ser el hijo de un millonario cuando se quiere huir de su sombra. Musk no es cualquier empresario. Es el hombre que quiere colonizar Marte, que ha moldeado el mercado de los autos eléctricos con Tesla, que juega a la inteligencia artificial con Neuralink y que ahora dirige X (antes Twitter), convertido en un altavoz del pensamiento conservador más agresivo. Mientras su padre multiplica su influencia global y amasa fortunas incalculables, Vivian solo quiere algo más simple: vivir su vida sin que el apellido Musk la defina. Quizá el verdadero desafío no es escapar de la fortuna económica, sino de la herencia moral que esta conlleva.

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