Los problemas se acumulan para el torero, que se despidió de los ruedos el pasado sábado en Huelva con un espectáculo que muchos críticos tacharon de "vergonzoso". Más allá del ruedo, la verdadera polémica de Martín Pareja-Obregón está en los juzgados pues su hija, Alejandra, fruto de una relación de juventud que él no reconoció, ahora reclama lo que le pertenece por derecho. Hace unas semanas, el diestro fue condenado a pagar 30.000 euros por un delito de abandono de familia (una sentencia que ha recurrido) y este martes Alejandra ha anunciado una nueva denuncia contra su padre. ¿El motivo? El impago de su manutención desde el pasado mes de marzo.
La joven ha asegurado en el programa de Sonsoles que hace ya un año que no recibe sustento alguno por parte de su padre. Tal y como ella misma adelantó hace unos días, de los 200 euros que su padre debería facilitarle mensualmente, apenas ve 30 o 40: "En Navidad me dio 60, como algo excepcional". Esta nueva denuncia atañe únicamente los últimos 12 meses de presuntos impagos, pues el torero ya ha sido condenado por faltar a sus responsabilidades en años anteriores en una sentencia que le obliga a pagar 30.000 euros en concepto de retrasos e indemnización a su hija, pues la Justicia considera que tiene capacidad económica para hacer frente a esta deuda, ya que ha estado activo en negocios y colaboraciones televisivas. Además, el torero mantiene una serie de inversiones y actividades empresariales: junto a novia, regenta un local de flamenco y es administrador en tres sociedades. Por otro lado, recibe ingresos por el alquiler de una vinoteca y posee una vivienda de dos plantas en Sevilla valorada entre 155.000 y 285.000 euros.
Él, por el momento, no considera que dicha sentencia sea justa y va a recurrirla. Además, según Paloma García Pelayo, está considerando interponer una demanda contra su hija, Alejandra, por sus declaraciones: "Es un sinvergüenza", dijo. "Para mí no es mi padre. Un juez lo dice, un juzgado lo dice, mis apellidos lo dicen, pero yo no lo reconozco. Yo a ese hombre lo veo por la calle y ni lo reconozco".