A sus 26 años, atraviesa uno de los mejores momentos de su vida. A punto de casarse con el músico Justin 'Blue' Long, Paris Jackson, la hija más popular del fallecido Rey del Pop, ha confesado que lleva "cinco años limpia y sobria" tras años luchando contra terribles adicciones: "Soy alcohólica y adicta a la heroína". En una estremecedora carta, la joven modelo confiesa haber tocado fondo: "Dios, no puedo creer que casi lo perdí todo".
"Hoy se cumplen cinco años limpia y sobria de todas las drogas y el alcohol y decir que 'estoy agradecida' sería un eufemismo pobre", asegura. "Porque esa gratitud es más de lo que se ve en la superficie. Es porque estoy sobria que hoy puedo sonreír. Es porque estoy sobria que puedo hacer música y tengo la oportunidad de experimentar la alegría de amar a mis perros y gatos. La sobriedad me ha ayudado a sentir mi corazón roto en toda su gloria".
La experta en moda acompaña su mensaje con unos escalofriantes vídeos que retratan los peores momentos de su enfermedad, en los que aparece bebiendo, llorando y fumando: "Gracias a la sobriedad hoy puedo llorar, puedo reírme, puedo bailar, puedo confiar. Gracias a la sobriedad puedo sentir el sol en mi piel y sé que está caliente. He descubierto que la vida es algo que sigue sucediendo, independientemente de si estoy sobria o no... Pero gracias a la sobriedad hoy me puedo mostrar como lo hago y aquí hay un pequeño vídeo de todo lo que ha sido posible debido a este proceso", finaliza.
Paris dejó atrás toda esa pesadilla. Dos años después de comenzar su proceso de desintoxicación conoció al músico Justin 'Blue' Long, que se convirtió en su principal apoyo. Ahora, tres años después de comenzar su relación, se han prometido: "Compartir mi vida contigo ha sido un torbellino indescriptible y no podría soñar con nadie más perfecto para hacer todo esto. Gracias por dejarme ser tuya. Te quiero mucho".