Siempre hemos dicho que la justicia tiene sus tiempos y que no tienen nada que ver con lo que ocurra por los platós o las revistas del corazón. Por eso la jueza que lleva la demanda de paternidad de Bertín Osborne con el hijo de Gabriela Guillén no solo no paralizó este proceso judicial, sino que ha puesto fecha para que se celebre el juicio el próximo 22 de enero. Hemos contado varias veces que, a pesar de todas las dudas que el entorno de Bertin sembró en cuanto a la paternidad del bebé, al final el cantante, animado por su amigo José Luis López El Turronero, accedió a firmar un comunicado conjunto con Gabriela, donde asumía esa paternidad.
Pero ese giro en su actitud no convenció o sirvió para que la jueza acabara con la demanda de paternidad que sigue su proceso y que, como decimos, tendrá su siguiente cita el 22 de enero. Ese día es cuando se escucharán todas las versiones, se mostrarán las pruebas, incluso testigos, y se dictará auto con esta paternidad que Bertín Osborne ha asumido de palabra, pero no de obra.
"No espero nada para no decepcionarme", declara Gabriela Guillén hoy día que su hijo cumple su primer año de vida. "Con Bertin no he hablado por teléfono en ningún momento. Nos hemos intercambiado algunos correos electrónicos por asuntos importantes pero nada más. Es muy triste porque se está perdiendo muchísimas cosas de nuestro hijo, de entrada este primer año, pero yo no puedo obligar a nadie a que actúe de otra manera. Nuestro hijo fue cosa de los dos. Es verdad que fue una sorpresa ya que no lo buscábamos y que yo por mi forma de ser quise seguir adelante. Pero que él no lo haya deseado no significa que no tenga una responsabilidad como la tengo yo", asegura Guillén quien habla con dolor al ver como después de un año del nacimiento de su hijo nada ha cambiado.
A punto de recibir a su hermana y su sobrina que llegan a Madrid para pasar este fin de año a su lado, la esteticista paraguaya está preocupada con la otitis de su niño que le tiene en cama y por lo que ha ido dos veces seguidas al pediatra. "Mi hermana es enfermera y estoy deseando que aterrice porque me va a servir de muchísima ayuda estos días. Estar con mi familia es la noticia más bonita que puedo tener", añade. Días atrás, Gabriela sorprendió en una entrevista en el programa De Viernes al revelar que había sufrido abuso sexual por parte de un familiar cuando era muy joven.
Precisamente de ese tema es del que tiene ya muchas páginas escritas para un libro que confía verá la luz en el año 2025, siempre y cuando su trabajo y el cuidado de su bebé le deje tiempo tiempo para acabarlo. Que haya coincidido este anuncio con el libro que Fabiola Martínez también ha escrito en donde cuenta los abusos que ella vivió de adolescente hace que la coincidencia sea hasta malinterpretada por algunos. "Yo no sabía nada del libro de Fabiola. Esto es algo que me pasó hace muchos años y que llevo tiempo escribiendo en una terapia que hago para superar tantas cosas que me han ocurrido", asegura. Lo cierto es que la paraguaya termina el año con "la cuenta corriente tiritando" tras lanzarse como empresaria con un negocio de belleza que ha abierto en pleno barrio de Salamanca de Madrid y que espera de los frutos necesarios este año nuevo para lograr su sueño.
Eso no quita que una vez termine la demanda de paternidad, la jueza sea quien dicte la resolución con las medidas que acuerde de cara a la responsabilidad del cantante con su hijo y se hagan efectivas ya que hasta la fecha ha sido Gabriela quien ha hecho frente a todos los gastos de un bebé cuya intimidad protege al máximo y por el que siempre utiliza un discurso de empatía y tender puentes con el cantante. "No quiero que el día de mañana mi hijo pueda ver imágenes mías, criticando o hablando mal de su familia. He cultivado la empatía y quiero seguir en esta línea por el bien de mi hijo. Todo lo hago pensando en lo mejor para él".