El cantante Raphael (81) ha recibido este viernes 27 de diciembre el alta hospitalaria tras pasar diez días ingresado en el Hospital Universitario 12 de Octubre, donde fue diagnosticado con un linfoma cerebral primario. Este diagnóstico explica los síntomas neurológicos que presentó durante una reciente aparición en televisión, inicialmente atribuidos a un posible accidente cerebrovascular.
A su salida del hospital, Raphael, acompañado por su mujer Natalia Figueroa, evitó detenerse ante los medios congregados en las puertas del centro. Sonriente y sentado en el asiento del copiloto de un vehículo, lucía un sombrero cordobés color camel, un jersey de cuello alto y una chaqueta negra. Su hijo Jacobo informó brevemente a la prensa: "Se encuentra muy bien", añadiendo que no bajarían la ventanilla para evitar el tumulto.



Según el comunicado oficial del hospital, el artista ingresó el pasado 18 de diciembre y durante su estancia se le inició un tratamiento específico para esta patología. Este continuará de manera ambulatoria, lo que permitirá a Raphael regresar a casa.
Debido a su estado de salud, la agencia RLM, que representa al cantante, anunció la cancelación de los conciertos que tenía previstos para principios de 2025 en Estados Unidos, República Dominicana, Costa Rica, Puerto Rico y México. Las actuaciones fueron suspendidas por "prescripción médica".
La noticia ha generado preocupación entre sus seguidores, aunque la sonrisa de Raphael al abandonar el hospital ha sido interpretada como una señal de esperanza en su recuperación.
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