Susanna Griso ha hecho las maletas en este Puente de la Constitución para despejarse del trajín que supone vivir en la capital y ser una de las presentadoras de moda. Para sus días de libranza y desconexión, la periodista ha realizado un tour por los lugares más emblemáticos de Asturias y Cantabria en compañía de la sobrina del rey don Juan Carlos, María Zurita, con la que Griso guarda una buena amistad.
Ambas han presumido de su escapada a través de sus redes sociales. Tal y como indicó la conductora de Espejo Público en su perfil de Instagram, el viaje empezó en Asturias, donde disfrutaron de su excelente gastronomía y visitaron la imponente Basílica de Covadonga. "Visitando a La Santina", comentó Griso. La imagen compartida en sus redes sociales lleva por título una simple frase: "Visitando a La Santina". Pero lo que esas palabras no decían, la fotografía lo gritaba: un homenaje silencioso de la catalana al alma asturiana.

No faltó la visita a la Santa Cueva, donde la tradición de encender una vela adquiere el peso de un rito ancestral. En ese espacio sagrado, donde el susurro del agua que cae por las rocas se mezcla con las oraciones de los fieles, ambas amigas participan de un momento íntimo y solemne, sellando su conexión con la tierra que las acoge.
Los seguidores de Griso en redes sociales, especialmente los asturianos, se han volcado con comentarios llenos de orgullo y calidez. "Estáis en mi tierra, con La Santina. Un abrazo grande", reza el texto de una de sus admiradoras, reflejando ese afecto único que Asturias sabe prodigar a quienes la visitan.
El salto a Cantabria: un lienzo de paisajes y emociones
Tras disfrutar de Asturias, Griso y Zurita pusieron rumbo a Cantabria, una región que guarda con recelo la esencia de los pueblos con encanto, las montañas altivas y los valles que se pierden en el horizonte. Una vez allí, visitaron la zona de Turieno y Mogrovejo, donde se fotografiaron con unas espectaculares vistas a los Picos de Europa.
Mogrovejo, con sus casas de arquitectura tradicional y su atmósfera atemporal, se convierte en el escenario ideal para una pausa contemplativa. Allí, las dos mujeres encontraron algo más que vistas espectaculares: hallaron la serenidad que solo ofrecen los pueblos donde el tiempo parece detenerse.
Ya en Turieno, una fotografía de ambas acompañadas por una anfitriona local deja entrever otra faceta del viaje: la calidez de la gente. El texto "Gracias, Rosa" era una sencilla dedicatoria que encerraba un agradecimiento profundo, el tipo de gratitud que surge del encuentro con una hospitalidad sincera.

La belleza en lo sencillo: un viaje inolvidable
En un diciembre donde el frío es dueño y señor del norte, Susanna y María no se han dejado intimidar. Abrigadas con plumíferos y gorros de lana, han recorrido senderos, admirado paisajes y se han dejado abrazar por la magia invernal de estas tierras. Su elección de prendas es un reflejo de su propósito: comodidad para adentrarse en la naturaleza sin perder un ápice de estilo.
Este viaje no parece un simple respiro, es también un tributo a los paisajes y tradiciones que definen el norte de España. Griso y Zurita nos recuerdan que noes necesario cruzar fronteras ni buscar en lejanos continentes para vivir experiencias llenas de belleza y significado. Asturias y Cantabria, con su mezcla única de espiritualidad, naturaleza y cultura, ofrecen un escenario inmejorable para reconectar con lo esencial.
El norte como estado del alma
Susanna y María, más allá de los flashes y las redes sociales exhiben las postales perfectas de esta comunión con el alma del norte. Allí, entre el rumor de los bosques y el susurro de las montañas, han redescubierto para ellas y para todos que la majestuosidad no solo se mide en catedrales ni en paisajes infinitos, sino también en los pequeños gestos de las personas y en los silencios que invitan a la introspección.
Asturias y Cantabria, con su magnetismo telúrico, quedan como el recordatorio de que, a veces, la verdadera grandeza reside en saber mirar. Y ellas miraron, escucharon, y llevaron consigo, más allá de este puente festivo, un trozo del norte grabado para siempre en su memor
Susanna Griso y María Zurita mantienen una gran amistad desde hace años. La sobrina del rey don Juan Carlos fue un gran pilar para la comunicadora cuando esta se divorció a finales de 2020 de Carles Torras, con quien compartió 21 años de su vida y tiene tres hijos en común.
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