La ex primera dama norteamericana, que está de promoción de sus memorias, califica en un vídeo su trabajo de modelo posando desnuda y ligera de ropa como una "celebración de la forma humana". Melania Trump viene a decir que se dejaba fotografiar así porque hacerlo era coherente con sus principios y sus creencias más profundas. "¿Ya no somos capaces de apreciar la belleza del cuerpo humano?", se pregunta la tercera esposa del ex presidente norteamericano en el vídeo publicado en sus redes sociales.
Melania Trump reivindica su trabajo en un video de 45 segundos publicado en sus cuentas de redes sociales este miércoles. A sus 54 años (es 24 años más menor que su marido), ha decidido a abrirse al púbico en plena campaña presidencial de su esposo y también brinda algunos de los comentarios más extensos desde que dejó la Casa Blanca (a a que podía volver en enero de 2025) en enero de 2021.
"¿Ya no somos capaces de apreciar la belleza del cuerpo humano?", pregunta en el video, mientras en la pantalla aparecen imágenes de pinturas y esculturas clásicas, entre ellas "Lady Godiva" de John Collier y "David" de Miguel Ángel. "Deberíamos honrar nuestros cuerpos y abrazar la tradición atemporal de usar el arte como un poderoso medio de autoexpresión", reivindica Melania Trump (nacida como Melanija Knavs, nacida en la antigua Yugoslavia y actual Eslovenia).
Su defensa del desnudo en el modelaje, reivindicando la expresión artística, es solo uno de la serie de videos que promocionan una autobiografía que se publica este mes octubre. Su carrera como modelo no ha sido objeto de una amplia cobertura periodística desde la primera campaña presidencial de Trump en 2016.
Melania Trump no entró en campaña para apoyar a su marido hasta después del primer intento de atentado sufrido por el ex presidente durante un mitin en Butler (Pensilvania). Solo después de que Trump fuera rozado por la bala que pudo acabar con su vida, la ex primera dama rompió su silencio. La ex Primera Dama describió al autor de los hechos como un "monstruo" que veía a su marido como "una máquina política inhumana". A través del comunicado publicado en la red social X (antes Twitter), Melania hizo un llamamiento a la nación para "elevarse por encima del odio y de las ideas simplonas que encienden la violencia".
Asimismo, Melania relató el momento en el que se dio cuenta que su vida y la de su hijo menor Barron podían sufrir un cambio devastador. "Cuando vi cómo esa violenta bala golpeaba a mi marido, Donald, me di cuenta de que mi vida, y la de Barron, estaban al borde de un cambio devastador", manifestó la mujer del candidato republicano. "No olvidemos que las opiniones divergentes, la política y los juegos políticos son inferiores al amor. El alba está aquí de nuevo. Reunámonos. Ahora".
Fue el propio Donald Trump quien admitió que su esposa quedó "tocada" después de que el Departamento de Justicia (DOJ) lo acusara. Sin embargo, algunos informes revelan que estaba enfadada por el papel de su marido en el presunto pago de dinero por su silencio, y la relación extramatrimonial con la estrella porno Stormy Daniels. Otros afirman que ella apoya a su marido, pero prefiere estar sola. Diversos medios norteamericanos publican artículos preguntándose si, en el caso de volver Donald Trump a la Casa Blanca (y es el favorito), estaríamos ante un presidente divorciado. En realidad, pocos se sorprenderían porque el candidato ya se ha divorciado dos veces.

Melania Trump no fue vista junto a su marido tras el primer atentado hasta pasado un tiempo
Melania Trump sí ha participado después del ataque en la campaña de su marido. Pasó por la Convención Nacional Republicana de Milwaukee, Wisconsin, en la que se hizo oficial la nominación de su esposo como candidato republicano. La ausencia de Melania Trump como oradora principal generó diversas especulaciones, si bien algunos observadores políticos veían en esto una decisión personal de la ex primera dama para mantenerse alejada del foco político, una teoría que no concuerda con su nueva ofensiva para el lanzamiento y promoción de sus memorias.

¿Una Casa Blanca sin primera dama? El incierto futuro de Melania si Trump ganase las elecciones
"Se está distanciando aún más de su marido, de la política y de la escena social que la rodea", comentaba una experta citada por Vanity Fair hace apenas tres meses. La ex primera dama no oculta desde hace mucho tiempo que ella no lo pasó precisamente bien durante su etapa en la Casa Blanca. Retrasó su traslado inicial a Washington, pasó casi toda la presidencia en Palm Beach y "se sintió aliviada cuando terminó el mandato de su marido", según publicó People. Sobre la campaña de su marido se dijo no solo que ella no va a jugar un papel relevante, sino que, si ganase, "sería el peor de los escenarios para ella".

Varios expertos declararon al medio especializado en política estadounidense Axios que Melania no volverá a la Casa Blanca si su marido vuelve a ser presidente y que seguiría viviendo "a caballo entre Palm Beach (donde ha pasado los últimos cuatro años) y Nueva York, donde parece que su hijo Barron podría estudiar, concretamente en la NYU. Eso sí, acudiría a la Casa Blanca para cumplir con los protocolos: actos ceremoniales o cenas de Estado. Kate Andersen Brower, que ha escrito varios libros sobre las primeras damas estadounidenses, afirma sin tapujos que Melania "se está distanciando aún más de su marido, de la política y de la escena social que la rodea", ha dicho. La ex primera dama no asistió al juicio por soborno de su marido, ni a su rueda de prensa tras ser condenado, que tuvo lugar en el mismo edificio en el que ella posee una vivienda y en el que estaba físicamente en aquel momento.
