Llega el verano y la primera en apuntarse al carro e la televisiva Eva González, que amadrinó este jueves en Madrid la nueva colección de gafas Sunglass Hut y aprovechó para demostrar que la fama de borde que algunos le han adjudicado "no se corresponde con la realidad". "Soy una mujer de carácter, pero no de mal carácter", aclara.
Eva no es que esté guapa, es que es impresionante y los años mejoran que da gusto. De la 'Miss España' queda la sonrisa que enamoró a todos, y ahora suma la experiencia de una mujer que ya cumple veinte años delante de las cámaras. Pero incluso con esa cara y ese cuerpo se lamenta de las fotos en las que recientemente se vio mientras se daba un baño en la playa. "Cada vez soporto menos el calor pero me gusta la actitud de la gente en verano que está más desinhibida. La próxima semana empezamos a tope con las grabaciones del programa y sólo podré cogerme unos días de descanso en agosto. Reconozco que lo que más me gusta es ponerme las chanclas, el moño, la cara lavada y estar con los míos. Los planes que más feliz me hacen son los que menos lío suponen. Mi niño, amigos y familia y ya está. No necesito más". "Debería estar prohibido pillar a una persona el primer día que va a la playa. Yo estaba blanca como el nácar. Cuando me vi me dije que cómo podía tener tan mala suerte de que me sacaran así. No me enfado, pero vamos, si me hubieran pillado unos días después, ya me vería algo mejor porque todas sabemos cómo nos vemos el primer día de playa y no te digo en la portada de una revista".

La modelo reconoce que está viviendo un momento de la vida "tranquilo" en el que siempre se ha sentido "querida por los medios a pesar de algunos momentos". Sobre polémicas que intentan salpicarle cuenta que no va a "participar nunca" y en eso se ha sabido proteger casi siempre. Apasionada de la moda, disfruta con las gafas de sol y un pensamiento reincidente es crear algo propio cuando vea el momento. "Empecé en televisión con 21 años y ya llevo 22. Me encanta lo que hago. La Voz es una suerte para mí porque vivo muchas sensaciones y unos directos que son adrenalina pura para los que nos gusta presentar y amamos esta profesión".
Eva no huye del trabajo y en eso tiene el ejemplo de sus padres, especialmente su padre, un agricultor que se tenía que levantar a segar a las tres de la mañana con tractores donde no existía el aire acondicionado. "Siempre he sido disciplinada porque he visto su ejemplo a diario. No se me considero una diva de la televisión ya que aún me queda mucho por aprender pero he estado arropada por un equipo". A la hora de recibir los comentarios de su familia, Eva recuerda la alegría de su padre. "No podía ni verme salir en la tele, lloraba de la emoción", cuenta con cierta nostalgia por su ausencia.
Madre de un niño de seis años fruto de su matrimonio con Cayetano Rivera explica con naturalidad cómo el pequeño apenas sabe que su madre es un personaje tan mediático, y de ahí que le sorprendan cuando le hacen fotos por la calle. "Al principio quería ponerse en medio y yo le explicaba que mejor fuera de la cámara. Es muy pronto para saber hacia dónde irá pero ni su padre ni yo queremos que sea torero. Sabemos lo que implica una profesión tan dura y lo mejor es que encuentre su camino y busque su felicidad".
Eva empatiza con su compañera de cadena Cristina Pedroche, que ha escrito un libro para hablar de sus miedos y cómo gestionarlos después de su maternidad. "Yo también me volví una miedica, porque eres otro tipo de mujer después de la maternidad. Hay que asimilarlo, vivirlo, sudarlo y llorarlo. Ahora que mi hijo tiene seis años empiezo a salir de esos miedos". El amor de su hijo la tiene en un estado de tranquilidad, y sobre la posibilidad de encontrar un nuevo amor, asegura: "Tengo paz mental y sosiego, trabajo y a mi hijo, salud… pero no unas ganas especiales de encontrar pareja". "Un hombre tiene que tener algo que me enamore. Son sensaciones y energías. No estoy ni cerrada ni abierta. Estoy en la vida", dice divertida.
Reconoce ser "una disfrutona de la vida" y que jamás se ha ocultado de nada: "Soy celosa de mi intimidad pero nunca he mentido ni ocultado nada. Lo mejor es vivir todo con naturalidad y que sea lo que tenga que ser". A pesar de que su ex sea torero, Eva no tiene una afición taurina especial y es que ni iba antes de Cayetano ni va a hora a las plazas. Eso sí, cuenta que con su ex se lleva bien y que están unidos en que su hijo se críe feliz. Lo único que no acaba de entender es la fama de mal carácter que le han colgado hace años. "Alguien debió escribirlo en algún momento y se me ha quedado esa etiqueta pero no me considero una mujer con ese genio que dicen. Tengo carácter, pero no mal carácter". Desde luego en ese acto demostró que estaba encantada y relajada. También es verdad que no hubo preguntas incómodas sobre Lucía Rivera, la hija de su ex y la modelo Blanca Romero, quien hasta dejó por escrito en su libro la poca ayuda que recibió de su parte cuando estaba casada con su padre. Las comparaciones son odiosas pero hoy Lucía no para de repetir lo maravillosa que es la actual pareja de Cayetano Rivera, la presentadora portuguesa María Cerqueira, y es que hay descripciones que no necesitan más adjetivos.