La Audiencia Provincial de Madrid ha absuelto a Rafael Amargo de un delito contra la salud pública del que había sido acusado por la Fiscalía de Madrid en relación a la venta de droga en su antiguo piso de Malasaña.
Así consta en una sentencia, a la que tuvo acceso Europa Press, en la que los magistrados exoneran al bailaor, a su exproductor Eduardo de Santos y a otra persona juzgada por los mismos hechos.
Amargo, que ingresó en Soto del Real en noviembre por incumplimiento de medidas cautelares, se encontraba en libertad provisional desde el pasado 12 de abril, fecha en la que el juicio quedó visto para sentencia. Esta medida se acordó a instancias de la Fiscalía de Madrid para asegurar la celebración del juicio después de quebrantar las medidas impuestas de firmar ante el juzgado.
En su declaración, el artista manifestó que no tenía necesidad, "gracias a Dios", de dedicarse "a otra cosa que no sean las artes escénicas", recordando que ha sido "bandera y baluarte en España" del flamenco y comparándose con Lola Flores por su "generosidad". "Llevo tres años y medio callado y estoy contento por estar con ustedes. Voy que decir la verdad y toda la verdad de este delito provocado", señaló.
Su reacción tras quedar absuelto
"¿Y ahora qué? ¿Quién me devuelve estos cuatro años?", ha dicho este martes a la salida de los juzgados. Hay que recordar que todo comenzó en diciembre de 2020 cuando fue detenido junto a su pareja y otras dos personas en el marco de la 'operación Codax'.
"Vamos a estudiar bien la sentencia y mañana vamos a hacer una rueda de prensa en el despacho de Marcos García-Montes. Pero la letra más pequeña y la más grande dice lo que dice, que este hombre [refiriéndose a él mismo] está absuelto de todo". Y ha advertido: "Tendrá que rendir cuentas el directivo de la policía que ha montado todo esto, ¿no? Pero no sé, ya veremos".
Y ha añadido: "Lo que quiero ahora sobre todo es contárselo a mi padre y a mi madre". A su salida de las instancias judiciales ha estado acompañado por su letrado (el mismo que defiende a Daniel Sancho por el asesinato y descuartizamiento de Edwin Arrieta).
Se enfrentaba a nueve años de cárcel
Rafael Amargo se enfrentaba a nueve años de cárcel por un delito contra la salud pública en cantidad de notoria importancia, al igual que su productor Eduardo de Santos al mantener la fiscal sus peticiones de condena.

En los informes, el abogado Marcos García-Montes solicitó la libre absolución de Amargo y en el caso de que fuera condenado, que se le apreciara una eximente completa por adicción a las drogas y se le sometiera a un tratamiento ambulatorio.
Las intervenciones telefónicas y el testimonio de los investigadores de la Policía Nacional eran la principal prueba de cargo que tenía la fiscal para sustentar su acusación. Los abogados del artista solicitaron impugnar estas escuchas y finalmente han quedado anuladas. También los registros policiales "porque no se cumplieron las exigencias mínimas que dicta la ley" para llevar a cabo esos procedimientos, según recoge la sentencia. Este es el principal motivo por el que el artista ha ganado esta batalla judicial.
Los investigadores y la Fiscalía de Madrid sostenían que Rafael Amargo y Eduardo realizaban "compras conjuntas" destinadas a financiar la obra de Yerma, extremo que negaron los acusados al necesitarse como mínimo 100.000 euros.
En su informe, la fiscal manifestó que el trasiego de personas en el piso de Rafael, el segundo derecha del número 4 de la calle La Palma, en la época de los hechos investigados estaba acreditado por el testimonio de los agentes de la Policía Nacional.