La polémica está servida. Sharon Stone ha sido la última actriz en alzar la voz contra el machismo en la industria cinematográfica. Lo ha hecho contra el actor William Baldwin y el productor Robert Evans, que, según la intérprete, la forzaron a mantener relaciones sexuales con su compañero de rodaje en Acosada para asegurar la química durante el rodaje.
Fue hace unos días, en una entrevista en el podcast Louis Theroux, donde la artista de 66 años recordó esta experiencia. "Me llamó a su oficina. Tenía unos sillones muy bajos, de los años 70 u 80, así que estaba básicamente sentado en el suelo. En ese momento tenía que estar en el set de grabación", avanzó sobre Evans.
"Estaba ahí, corriendo por el despacho con gafas de sol, explicándome que se acostó con Ava Gardner y que yo debería acostarme con Billy Baldwin, porque si me acostaba con él, la actuación de Billy mejoraría, y necesitábamos que mejorara en la película porque estaba siendo un problema", apuntó.
Not sure why Sharon Stone keep talking about me all these years later?
— Billy Baldwin (@BillyBaldwin) March 12, 2024
Does she still have a crush on me or is she still hurt after all these years because I shunned her advances?
Did she say to her gal pal Janice Dickinson the day after I screen tested and ran into them on our… pic.twitter.com/PtgqMC6Sgz
Según Stone, lo que se consiguió con este mensaje fue el efecto contrario: ella se sintió incómoda y cohibida durante la grabación, que contaba con una alta carga erótica. "El verdadero problema de la película era yo, porque estaba muy tensa y pensaba que no era una actriz de verdad, que pudiera tener sexo con él y dejar las cosas como estaban", apuntó la artista.
Esta confesión, que llega cinco años después de la muerte del productor a causa de una enfermedad cardiovascular, ha provocado un aluvión de comentarios a nivel internacional. También del propio Baldwin, que ha respondido con sorna a las palabras de la actriz pese a la crudeza de su relato.
"¿Todavía está enamorada de mí o todavía está herida después de todos estos años porque rechacé sus insinuaciones?", ha expresado. Y ha advertido: "Me pregunto si debería escribir un libro y contar las muchas, muchas historias inquietantes, pervertidas y poco profesionales sobre Sharon. Eso podría ser divertido". El intérprete afirma, además, que pidió al productor coreografiar una de las escenas de sexo para evitar besar a su compañera.