Ana Obregón no solo anunció que los beneficios obtenidos de sus exclusivas ni de su libro irían destinados a la Fundación Aless Lequio. En las redes sociales lleva un tiempo publicitando productos de cosmética de LaCabine, empresa con la que colabora, y asegurando que las ventas se traducidirían en donaciones para la institución.
Obregón afirma en sus publicaciones de Instagram que, como embajadora de la marca, "todo" beneficio iría destinado a la fundación, dedicada a la investigación contra el cáncer. "Colaborar con LaCabine me hace mucha ilusión", informaba en un post desde Mallorca este pasado verano. A este se sumaron otros tantos.


Estas declaraciones se han analizado este martes en Antena 3, donde la periodista y presentadora Gema López ha llegado a comentar que Obregón podría estar haciendo "publicidad engañosa" no solo con sus exclusivas y el libro sobre su hijo, sino también con las colaboradores con LaCabine, empresa de productos cosméticos.
"Si vendo un producto que es una crema y digo que ese dinero va a la fundación, tiene que existir transparencia. Hablaremos con una abogada para saber hasta qué punto Ana es responsable de una publicidad engañosa", ha expresado López, dando paso a la abogada Sylvia Córdoba, curiosamente ex del magistrado de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz. "La persona que hace una donación o compra un libro no tiene acceso a esas cuentas. Si hubiera un caso de malversación, el patrono podría ser denunciado", ha apuntado la letrada.
Alessandro Lequio, en defensa de la fundación, pero no de Ana
Por su parte, Alessandro Lequio, quien vicepreside la fundación, ha vuelto a reivindicar este martes la labor de dicha institución: "Están hablando de la fundación como si fuera la Cruz Roja con edificios por todo el mundo. Y de momento la nuestra es una fundación joven, humilde, con un solo empleado a tiempo parcial. Tenemos mucho cuidado en no malgastar ni un solo euro de la fundación porque la fundación tiene un fin muy claro".
Eso sí, pone a Obregón en el centro de la diana porque, insiste, las cuentas de Ana son las de Ana y las de la fundación las de la fundación. Lejos de salir en defensa de su ex, ha dicho: "La fundación es una fundación joven, pero sana con unas cuentas muy claras. Otra cosa es el compromiso que Ana ha adquirido públicamente. Yo no lo sé si lo ha hecho o no. Los deseos y voluntades de cada uno son los deseos y voluntades de cada uno, ella ha podido cambiar de idea en un momento dado, pero es una cosa suya. En la fundación estamos haciendo nuestra labor". Y ha rematado: "No sé si Ana ha cumplido los compromisos que ha adquirido públicamente. Es una cuestión moral suya".
